Observo el paisaje obscuro por la ventana, suspiro una vez más, se había olvidado de traer un paraguas, miro hacia el resto de sus compañeros de clase, cada uno estaba hablando con otras personas, algunos simplemente miraban sus celulares, u otros dormían, como el caso de su compañero que estaba sentado delante de él. Otro suspiro salió de sus labios
- ¡Ya deja de suspirar Kuroko! - dijo el chico delante de el
-Siento interrumpir tu siesta Saotome-Kun- dijo el chico fantasma
Saotome Arata, un chico de 15 años, estudiante de primer año en la preparatoria Kirisaki Daiichi, hijo de un importante ejecutivo japonés y su compañero de clases. Arata era un chico de cabello rosa en tonos rojizos y ojos lila, a diferencia de todos los amigos que había tenido Kuroko, el joven Arata, no era un chico corpulento, es más, era flaco y unos centímetros más altos que el propio Tetsuya
Kuroko lo había estado observando la primera semana, sorprendentemente Arata, a pesar de ser alguien que no le gustara los deportes, por lo cual era parte del club de regreso a casa, el chico tenía la posibilidad de verlo. Luego del primer día de clases, al día siguiente tal como siempre pasaba nadie se acordaba de Kuroko, la fiebre de ese día en la escuela de que el tan afamado chico popular Hanamiya Makoto tenía un hermano, había desaparecido, y así, todos lo olvidaron, o eso creyó Kuroko, porque al tomar asiento Arata lo saludo
Desde entonces el joven sentado frente a él, lo saludaba todos los días y se podría decir que eran amigos, a Kuroko le hizo bien el saber que alguien que no fuera el equipo de Basket de Kirisaki Daiichi lo notara, porque incluso ese equipo de tramposos se olvidaba de su existencia en algunas ocasiones, pero quizás Arata fuese la única persona que pudo verlo por primera vez sin tener que decir su típica frase de "Eh estado aquí durante un rato"
-Ah Maldición ¡Quiero irme a casa! - dijo Arata
-Saotome-Kun apenas estamos en el segundo periodo- le dijo Kuroko
-Ya te dije que me llames por mi nombre Tetsu, no me gusta tu formal "Saotome-Kun"- dijo imitando su voz monótona de emociones- además, debes de admitir que el día se presta para no hacer nada, e incluso el profesor Sato-San falto
-Lo que usted diga Saotome-Kun
El chico se quejó con un "Porque eres tan frio Tetsu" de forma aniñada, Kuroko podía decir que Saotome Arata era un chico extraño, su personalidad era una rara mezcla de entre las quejas de Kise, la indiferencia de Aomine y la infantilides de Hara Kazuya, y así mismo no lo era, su compañero de clase era una persona rara- como si Kuroko no estuviese rodeado de personas raras ya- y que no podía descifrar a pesar de observarlo atentamente, una vez más, Kuroko suspiro
La campana que dio inicio al almuerzo sonó, y de inmediato Arata se dio la vuelta mirándolo- Tetsuya ¿Vamos a la cafetería? -
Kuroko estaba seguro de que podía ver una cara de perro degollado en el rostro de su compañero – Esta bien, hoy no prepare mi almuerzo, asique creo que funcionara
De esa manera Tetsuya y Saotome se dirigieron a la cafetería, Kuroko escuchaba las quejas de su compañero acerca de la molesta hermana mayor que el chico tenia, no tardaron mucho en llagar, mientras Arata fue a buscar una mesa para los dos, Kuroko fue a comprar el almuerzo, una vez con este en la mano busco a su compañero con la mirada, a lo lejos lo vio sentado con los pies sobre esta, Kuroko solamente negó ante la pereza de Saotome, mientras que fue a su lugar, pudo ver de reojo a Hanamiya y el resto del equipo de Basket que le hacían una seña para que valla con ellos a almorzar, pero Tetsuya negó y fue donde Arata
Llego con una bandeja que contenía dos sándwiches completos, un refresco de cola, su batido de vainilla, y dos postres de chocolate, apenas estaba por tomar su batido cuando escucho el característico sonido de una goma de mascar rompiéndose a su lado
ESTÁS LEYENDO
Querido Hermanastro
FanfictionFue después de que Seirin perdiera la InterHigh cuando su padre le dijo a Kuroko Tetsuya que se irían a vivir a la casa de su novia, y lo cambiarían de escuela, sin embargo, de todas las personas posibles Tetsuya jamás se imagino, Que terminaría sie...