Compartiendo

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-¡Makotonii, Makotonii despierta!

La vocecita de Haruka con ese entusiasmo característico lo llamaba para que se levante.
Makoto abrió pesadamente sus ojos, sujeto la almohada que estaba a su lado y se tapó la cara, esperaba que la niña se fuera al ver la poca atención que el le prestaba

Makotonii!- la niña insistió
Maldición no se callara pensó Makoto, Asique con toda su poca fuerza de voluntad destapó su cara y miro a la niña

-Haruka buenos días- saludo sin moverse un solo centímetro de la cama

-Hoy bajará a desayunar con nosotros ¿verdad?- pregunto ella de manera inocente

Hacia un mes que los hermanos Kuroko se habían instalado en su casa y aunque pasaban todo el día juntos, Makoto aún no se acostumbraba a tenerlos

Tras tantos años solo- porque su padre se había ido cuando el era pequeño- se había acostumbrado a aquella soledad que aplacaba con sus estudios y el Basket ¿Qué mejor que eso?

Ahora su presente era ser un hermano mayor… de la niña que estaba frente a el y del chico que estaba en la cocina, lo cual para el, se convertía en una molestia

-Tetsunii me pidió que no te moleste, pero yo quiero que desayunes con nosotros- dijo decidida

Kuroko Haruka era insistente, no se rendía fácilmente -  actitud similar a la de su hermano- Todos los días a las 07:00 de la mañana iba a despertarla para que desayunara y el se zafaba de ellos… eso de convivir en familia era incómodo, no sabía como actuar ante la alegría de la niña.
Kuroko no decía nada- cosa que era obvio el chico siempre estaba serio y a pesar de que se llevarán un poco mejor eso era todo- no lo presionaba, simplemente le dejaba el desayuno sobre la mesa, mientras que dejaba a su hermana en la escuela, luego cuando volvía ambos tomaban el tren hacia la escuela

-¿No quieres estar con nosotros?- pregunto Haruka con un puchero y sus ojos cristalizados

- No, No es eso…- Genial, Maravilloso Makoto. Ahora estaba haciendo llorar a una niña porque no sabía comportarse- bueno, en su defensa tenía una personalidad retorcida y no le gustaba tratar con niños – asique rápidamente le contesto a la niña- Sólo déjame vestirme y bajo ¿Está bien?

De inmediato los ojos de la niña se volvieron felices y cualquier rastro de tristeza había desaparecido de manera inmediata- ¡Esta bien!- la niña salió de la habitación canturreando feliz

Maldita manipuladora pensó brevemente, con las pocas ganas que tenía de levantarse, se dirigió al baño, donde se tomó una rápida ducha- aún le dolía los músculos, no tanto como en el primer entrenamiento, pero aún así dolía- luego salió de su baño privado con una toalla amarrada a su cintura y se comenzó a vestir con el uniforme, una vez que terminó tomó su bolso y salió del cuarto

Al bajar las escaleras el olor dulce llegó a sus fosas nasales

-Tetsunii tenemos un invitado- dijo Haruka sentada en la mesa frente a un enorme plato lleno de hotcakes  y una taza de leche

-Buenos días Makoto-san-  el rostro serio del chico fantasma mientras preparaba la sartén para cocinar otra masa fue lo que lo recibió

Querido HermanastroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora