UNA BLACK Y UN POTTER || Harry Potter & Tú

~2~

DESPEDIDA.

Nos separamos un poco para poder vernos de frente, tomo mi rostro entre sus manos.

-Cuanto has crecido... eres igual que tú madre... excepto los ojos esos...- decía pero lo interrumpí

-Son tuyos, el tío Lupin lo dice muy seguido- dije sonriendo leve

El soltó una risa pequeña.

-En serio te extrañe demasiado- dije con una sonrisa de inmensa felicidad

-Y yo a ti- dijo con una mirada melancólica

-Bien, los dejaremos solos, tienen que ponerse al tanto- dijo el tío Lupin saliendo de la cocina junto con la tía Tonks

-Y bien, ¿Que has hecho estos años hija?- pregunto mi padre prestándome atención

-Pues cuando cumplí once años, me llevaron a comprar mi varita, desde entonces estudié demasiado, voy dos años adelanta que los chicos de mi edad, de hecho el tío Lupin dice que tengo talento nato y que soy una bruja especial, pero no entiendo aún por qué lo dice, digo, solo estudio y me esfuerzo en mis prácticas- dije sin tomar mucha importancia

Pero la cara de mi padre decía todo lo contrario, el parecía nervioso.

-Lo dice por qué eres dedicada, eso cuenta mucho- dijo un tanto nervioso

-Si, tal vez... bueno, fuera de eso, todo a marchado normal, ¿que tal tu papá?- pregunte con una sonrisa

-Cuando escape de Azkaban fui tras Pettigrew, escapó la muy rata, Harry y una amiga suya me ayudaron a escapar de Hogwarts, desde ahí estuve viajando para resolver otras situaciones- respondió

-Estuviste muy agitado desde que escapaste de Azkaban- mencione

-Si, pero todo valió la pena, ahora ya estoy contigo- dijo sonriendo

Yo respondí igualmente con una sonrisa.

-________, ¿que hechizó no podías hacer?- pregunto el tío Lupin entrando a la cocina

-Es un hechizo de protección, no sé si lo estoy diciendo bien- expliqué

-De acuerdo, lo veremos más tarde- dijo Lupin

-Oh no está bien, puedes ir a estudiar, tengo que hacer unas cosas, nos podemos ver más tarde- hablo mi padre

-Esta bien- dije levantándome de la silla y acercándome para darle un abrazo- gracias papá- añadí en el abrazo

-De que- respondió

-Bien, vamos a estudiar- dijo Lupin

Ambos subimos a la habitación donde me daban clases, por lo general estaba todo el día ahí.

El tío Lupin me ayudo con el hechizo, el cual termine por hacerlo perfecto, después de eso estuve practicando más hechizos, la mayoría logré hacerlos a la primera pero otros me costaban trabajo.

-Me sorprende lo mucho que has avanzado, es todo por hoy pequeña- dijo Lupin

-¿En serio?, ¿Hoy no me pondrás en duelo?- pregunte confundida