15. Humanidad

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Por RonaldoMedinaB

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Por RonaldoMedinaB


Lo primero en surcar la carretera lóbrega fue una brumosa luz azul. Se extendió con gran rapidez, regresándole el color al grisáceo lugar. Luego se transformó en energía feroz, centelleante, que dio vida a un portal. Segundos después una sombra se reflejó en él, y una tras otra salieron, hasta que los héroes estuvieron completos.

Sus ojos viajaron con detenimiento a través del panorama. Era tétrico. A unos cuantos pasos de ellos colgaba un letrero gigantesco semidestruido, a punto de caer de la estructura, cubierto por las manchas negras de la muerte al pasar.

«Bienvenidos a Capital City», leyeron.

Jonathan cayó de rodillas al detallar lo que se hallaba por delante. Su rostro se plegó en una expresión dolorosa. La flora que rodeaba la carretera se hallaba destruida, e incluso el humo, como residuo de los incendios, aún destilaba sobre los pocos troncos en pie. Los edificios más cercanos estaban hechos ruinas, como si por ellos hubiera pasado un terremoto tras otro.

—Qué le han hecho a mi ciudad —murmuró, con su voz a punto de quebrarse.

Todos se mostraron impotentes ante la escena que contemplaban. Por un momento, incluso a tal distancia, alcanzaron a escuchar desesperados gritos residuales que el viento se encargó de transportar en sus corrientes desesperanzadoras.

James, consciente de todo lo que estaba en juego, se vio obligado a romper el silencio.

—De pie, Blazer —enfatizó—. Sé cuán doloroso puede ser ver tu hogar hecho ruinas, pero ahora no hay lugar para las emociones. Lo que acabamos de ver es solo un indicio de lo que nos deparará la ciudad. Que esto sea un motivo más para luchar hasta agotar nuestro aliento. —Jonathan asintió y obedeció al llamado. Al reincorporarse al grupo contuvo la ira en sus puños—. Desde aquí iremos a pie. —Asintieron—. Y recuerden. —Se giraron a verlo—. Hemos venido juntos, como un equipo, y planeo que regresemos así.

Todos mostraron su acuerdo con un breve movimiento de cabeza, y, unidos, se abrieron paso hacia la ciudad.

—Buon discourso —le susurró Venatrix, a lo que él le respondió con una sonrisa leve.

—Buon discourso —le susurró Venatrix, a lo que él le respondió con una sonrisa leve

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Escuadrón de Héroes: InvasiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora