둘 ; primer beso

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Dicen que el amor es ciego, cuando te enamoras de alguien no piensas en nada; más que en esa persona, no mides lo que haces, y amas sin control, entregándolo todo. Así se sentía Soobin al estar con Yeonjun, un completo botarate.

Cuando el mayor lo dejó, con la absurda excusa de ya no amarlo, éste se sorprendió mucho, era la única emoción y reacción que se albergaba en su cabeza, en su corazón; sorpresa. Al analizar aún más la situación, Soo sólo podía sentirse cada vez peor.

Pasó de la sorpresa a el desconcierto, del desconcierto a la decepción, de la decepción a una tristeza profunda.

El chico de piel tersa alguna vez llegó a leer en un artículo que es real que las personas pueden morir de tristeza; el corazón comienza a tensarse por esta fuerte emoción, el estrés se acumula, ocasionando el síndrome del corazón roto.

Soobin podía sentir como poco a poco su corazón comenzaba a perder el control, podía sentir cómo se desgarraba por dentro, las palabras del mayor rebotando en su cabeza, sin parar.

Ya han pasado tres días desde que el chico de lindos labios dejó a Soo, tres días desde que no se tocan, no se besan, no se hablan, tres días desde que no se han visto. Hace tres días Soobin sintió cómo se le era arrancada una parte de su alma.

Todos le decían que estaría bien, que todo iba a mejorar, que sólo serían unos momentos en los que se sentiría de esta manera. Soobin esperaba que eso se cumpliera. Ya no quería sentir dolor, odiaba el sentir sus mejillas húmedas, sus labios temblar con sollozos y gemidos de angustia. Se sentía tan patético. Tan vacío. Tan solo.

Ya no sabía qué más hacer, pasado un mes había intentado muchas cosas; salir con sus amigos de la preparatoria, pasar el tiempo con su familia, clases de música y teatro, nada lo distraía lo suficiente, sólo descubrió tener una gran pasión por el arte.

Oh, y casi lo olvida, conoció a un pequeño chico de lindos lunares en su rostro, Kai. Alumno nuevo, de linda sonrisa, un año menor pero con la suficiente inteligencia para estar en su curso.

Un día de lluvia llegaba tarde a su clase de música, encontrando al pequeño, -que curiosamente era muy alto-, buscando el taller de teatro. El mayor decidió ayudarlo, recordando cómo siempre tuvo a Yeonjun a su lado, apoyándolo desde lo más mínimo hasta el problema más grande que tuviere, así enamorándose de él, logrando ser correspondido, logrando obtener un corazón roto también.

Soobin buscaba de todo para olvidar su dolor, resultando el delgado chico una gran distracción, descubrieron que comenzarían a compartir sus clases, siendo ambos compañeros de curso, probablemente el lindo Hyuka decidiera unirse al taller de música, sólo para pasar más tiempo con su mayor. Después de todo, Soobin era su único amigo real en el instituto.

Kai Kamal Huening es su nombre completo, el cual comenzó a pasar de boca en boca vertiginosamente, el chico pronto era la persona más popular en el instituto, junto a Soobin. Ambos siendo los alumnos estrella en toda la institución, con un increíble atractivo y asombroso talento con sus voces. Esto último descubierto en el taller de canto, al cual Kai se unió con el fin de conocer a más gente con la ayuda de Soo.

Los dos chicos comenzaron a pasar demasiado tiempo juntos, Soobin ni siquiera tenía tiempo de recordar su pesar, ya no había cabeza para Yeonjun, no más minutos de su vida desperdiciados intentando saber qué se encontraba haciendo su mayor, sin saber si se encontraba bien, sin preguntarse dónde estaba después de haber desaparecido de la nada, no más Yeonjun.

Toda su atención se centraba en el lindo chico alto y menor que él, de curiosos pero lindos lunares desperdigados por su delicado rostro, cual obra de arte, como aquellas estrellas que se ven de noche en el oscuro cielo.

Efímero - soobin & yeonjunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora