Richie frunció los labios y apretó las manos en puño molesto y decepcionado. Su ángel no habia venido. Ni ese día ni los siguientes. Richie vino varias veces con la intención de ver si su ángel había venido pero nunca lo hizo y eso hizo sentir su pecho doler. Richie deseaba tanto ver esos hermosos ojos y esa sonrisa deslumbrante.
Incluso había ido hasta la casa de su ángel y como todo un criminal se puso a ver a través de las ventanas pero lo único que había logrado ver fue al monstruo que el ángel tenía como madre quien lo había visto fisgonear y lo había corrido a gritos, no había vuelto a la casa por miedo a la mujer. Y así habia pasado una semanas y luego otra sin poder verlo. ¿Cuánto más tenía que esperar para ver a su ángel?
Pateó una piedra y se dio la vuelta para irse a su casa, luego su mamá se molestaría si llegaba otra vez tarde. Se subió a su bicicleta y pedaleo rápidamente. Mañana era lunes y el inicio a su tortura, la escuela. Lo único que lo mantenía esperanzado era que volvería a ver su ángel en la escuela ya que era la única en Derry y la única manera de no verlo era que estudiará en su casa. Llegando a su casa ignoro a todos por el enojo y se encerró en su cuarto.
Tal vez era un niño y para sus 8 años no eran tan correctos sus pensamientos pero el podía imaginarse mayor y a un Eddie mayor como pareja y con un familia, viviendo en la playa con un perro de mascota y 4 hijos, el trabajaría para mantener a su familia mientras su ángel se quedaba en casa con los niños. Su Eddie tendría una marca que los uniría por toda la vida. Richie estaba totalmente seguro que el sería un alfa cuando tuviera la edad de presentar su casta y Eddie un omega.
Serían la pareja perfecta.
Pero para eso el necesitaba a su ángel con el. No a su ángel de la guardas, a Eddie, la cosa más perfecta y hermosa del planeta y del universo.
Los días siguieron pasando y su primer día de clases inició. Estaba ansioso y llegó temprano a la escuela, en la entrada se encontro con Stanley quien lo miró sorprendido.
-¿Estoy muerto?-inquirió su amigo
Richie rodó los ojos y lo golpeó. Entraron a la escuela y fueron a sus casilleros.
-¡Richie! ¡Stan!-exclamó una voz conocicida
Richie volteo al reconocer la voz de Bill y quedó impactado. Su amigo no venía solo. Junto a él venía su ángel, Eddie.
Ese día Richie, supo que su vida ya no sería igual.
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Nuestro destino
FanfictionTodos tenemos un destino, tu eres el mio. Reddie Richie x Eddie Omegaverse Richie alfa x Eddie omega Serán one-shots Reddie de su relación año tras año pero con continuidad. También habrán tipos extra donde se enfocarán en las otras relaciones.