4 Meses ; Trueno

DIEZ

10."Se que los celos te ganan pero igual no somos nada así que olvidate mi amor"

Narra Sofia

-¿Qué vas hacer? -me preguntó Maria.

Les cuento, dos semanas pasaron desde que hable con Mateo en el departamento y no había recibido ningún mensaje ni una llamada de él.

-No sé, sabes como soy yo, si no me habla yo tampoco le voy a hablar. Es increíble que sacará el tema del innombrable cuando ese pendejo me vale riata -hablé frustrada.

-Hablen, en la noche va a venir Thomi con unos amigos, yo planeo invitar a algunos, entre ellos Mateo.

-No sé, a ver que pasa en la noche, tengo que irme. Nos vemos -salí del departamento azotando la puerta sin querer.

Camine al ascensor y adivinen a quién me encontré esperándolo, sí, a Mateo. ¡Que suerte la mia!

Las puertas se abrieron y entre, bajo la atenta mirada de él.

-¿Cómo andas? -me preguntó.

-Bien -respondí un poco seca.

-¿A dónde vas?

-Por unas cosas al súper -respondí.
-¿Y tú?

-A casa de Manu -asenti y no dije nada.

Salí del ascensor y camine para salir del edificio.

Como lo dije, camine al súper que quedaba a unas cuadras. Compre cosas que me hacían falta. Recibí un mensaje de María pidiéndome que comprara alcohol para la noche.

[...]

Mateo por su lado fue a las casa de "Manu" que en realidad era la casa de una chica con la que había quedado.

-Amor -saludo la chica y Mateo la miro raro.

-No soy tu amor, no me digas así, me llamó Mateo ¿ta? -le habló mal a la chica.

-¡Uy que denso! De saber que estas con ese humor mejor no vengo -rodó los ojos.

-¿Venis? -le preguntó Mateo de mala gana para que se subieran al auto.

Mateo condujo a casa de la chica, Tatiana era su nombre.

Entre beso y beso la ropa fue sobrando y terminaron cogiendo. Cuando terminaron quedaron tirados en la cama uno al lado del otro, la chica lo trató de abrazar pasando su mano por su torso pero el la apartó rápidamente.

-No te confundas wacha, cogimos, nada más -se levantó y comenzó a cambiarse.

-Eres un pendejo de mierda.

-Ya sabes como son las cosas conmigo Tatiana -terminó de ponerse sus air force one y salió de la habitación.

Cuando iba conduciendo de regreso a casa, le entró una llamada de María.

-Que onda la pipol.

-Te esperó en mi depa.

-Estoy un poco lejos, pero cuando llegue caigo.

-¿En dónde andaba el Matein? -preguntó Maria con cierta picardía en el tono de voz.

-Que te importa boba -le respondió entre risas.

-¿Anda de mina en mina otra vez?

-Que te digo boluda, uno tiene necesidades -soltó una carcajada.