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Había pasado ya una semana desde que Emily y Megan se encontraron, esa semana después de la plática con la coach, Megan empezó a involucrarse más en sus actividades logrando balancear las materias semestrales que llevaba con los entrenamientos. Estaba intentando incluirse con las chicas del equipo pero por más que intentaba, era demasiado tímida y no encontraba temas de conversación. Todas hablaban de sus relaciones, pretendientes, viajes, salían de compras juntas, tenían una amistad que iba más allá de las piscinas, eso era algo que no le interesaba a Megan.

Emily había procurado toda la semana asistir a sus clases, le era muy complicado mantener interés pero estaba decidida a terminar su carrera en gran parte para hacer sentir a su madre orgullosa ya que era el único apoyo que recibía, lo que su padre opinara de su educación la tenía sin cuidado. Fue a ver a su mamá al campus dos veces en la semana, esperando encontrarse a Megan pero en ninguna de las dos visitas tuvo suerte. Emily no era de las personas que se enganchan con alguien pero en este caso, ella sentía que tenía que conocerla más a fondo, le interesaba mucho.

El viernes por la tarde Esteban invitó a Emily a una competencia de natación amistosa que se llevaría a cabo en las instalaciones de los delfines, serían pruebas libres de 50 metros solo Varonil, Emily estaba con la esperanza de que estuviera el equipo completo apoyando.

La señora Jennifer no iba a asistir debido a un viaje corto que tuvo que realizar con su esposo. Emily convenció a Hannah que la acompañara para que conociera a Esteban e hiciera en este caso el necesario mal tercio.

Las chicas llegaron al domo donde estaban ubicadas las piscinas, Hannah portaba un short blanco de corte ajustado combinado con un top corto de tirantes rosa palo mientras Emily vestía un short de mezclilla rasgado con una blusa negra. Subieron a la segunda fila de las gradas donde se encontraba el equipo de porristas y amigos de los competidores, Esteban ya se encontraba en el área de oficialia mayor donde ya estaba siendo asignado su carril y se encontraba en estiramiento. Volteo a ver a Emily y le regaló una enorme sonrisa mostrando un hoyuelo en su mejilla derecha y levantó la mano saludándola.

-Amiga, no esta nada mal tu chico- Hannah golpeó ligeramente el brazo de Emily mientras miraba a Esteban de pies a cabeza. Esteban tenía su piel bronceada, sus brazos y abdomen muy bien marcados, no era un cuerpo atlético exagerado, tenía bien proporcionado cada músculo de su cuerpo, sus rasgos faciales también eran lindos, tenia unos ojos negros como las aceitunas y sus pestañas eran muy largas y chinas.

-No es mi chico y no creo que logre serlo, está muy atento conmigo pero no- Los ojos de Emily estaban estaban buscando a cierta persona en el grupo, se canso de estar buscando así que mejor decidió disfrutar la competencia.

Desde pequeña su madre siempre la llevaba a todo tipo de eventos deportivos pero este era su favorito, intento practicarlo por un año pero lo dejo al sentirse presionada cuando todos esperaban que fuera la mejor al ser hija de la coach, aun le emocionaba ver pero ya no practicarlo.

La emoción por apoyara a los dos equipos se encontraba presente ambos todos se estaban divirtiendo, entendían que en esta ocasión era simple competencia amistosa.

Hannah estaba platicando con unas chicas de la facultad de Derecho cuando Emily recibió un mensaje, espero a que la competencia terminará para poder retirarse en la primera oportunidad que se presentará

-Hannah acompáñame necesito ir por unas cosas a la oficina de mamá antes irnos a comer con Esteban- Hannah tomó sus bolso disculpándose con las chicas y se retiraron.

Al bajar de las gradas iban caminando por las laterales de la piscina cuando un chico alto y delgado iba corriendo y chocó contra Emily haciéndola caer sobre su tobillo derecho.

Scars To Your BeautifulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora