Hechizado

3 0 0
                                    

La tensión se cernía sobre nosotros como niebla, la parte inferior de mi mejor amigo estaban ya transformados en piedra, y el beso de su novia no había dado resultado.

Se necesitaba un beso de valentía y amor correspondido para romper el hechizo, pero había quedado claro que era una vil mentira... o eso parecía.

Sus ojos se encontraron con los míos y vi miedo latente en ellos. Volteé hacia mi familia y su cara de preocupación me hizo dudar, pero al notar la mirada serena de mi hermano mayor supe lo que tenía que hacer.

Nunca asumí quién era yo.

Nunca enfrenté a nadie por miedo.

Era hora de ser valiente.

Decidido, di un paso adelante y la mirada atenta de todos se movió hacia mí.

Me acerqué al cuerpo casi totalmente inmóvil de mi mejor amigo y sus ojos reflejaron un mar de esperanzas.

Reuniendo todo el coraje que nunca fui capaz de demostrar, y aferrándome a las esperanzas que se desprendían de la mirada de Damián, acerqué mis labios hasta que chocaron con los suyos.

Y el mundo se iluminó.

Y la roca se deshizo.

Y mis miedos se esfumaron.

Y la magia nació.

Hechizo de valentíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora