Face The Past. [KnB Nueva Generación] [Cancelado]

Capitulo 3: A prepararse para la inter-high.

Pov. Tercera persona:

Después de ese encuentro con Kouta. Hayato tomó rumbo a casa, seguramente su hermano mayor y su hermana menor lo estarían esperando. Por otro lado con Kouta. Éste después de alejarse, se quitó la gorra, dejando expuesto su cabello púrpura oscuro.

"Es la primera vez después de mucho tiempo que me divierto jugando con otra persona." Pensó Kouta. "Él no es como mis otros compañeros de equipo."

Kouta fue a casa. Cuando llegó fue recibida por una mujer de cabello largo y rubio, de piel pálida y ojos azules como el cielo.
Era su madre, Miyako Niimura.

- Bienvenido, Kouta ¿Cómo estuvo tu día hoy?- Preguntó su madre.

- Bien, por así decirlo.- Le dijo Kouta como queriendo restarle importancia a aquello. - Hoy me encontré con un chico muy interesante.-

-¿A si? ¿Estudia en la misma escuela que tú?- Preguntó algo curiosa Miyako, mientras se sentaba en uno de los sofás de aquella sala.

- No exactamente. Es de otra escuela. Hoy jugué con él, contra unos tipos que estaban intimidando a otros chicos. Les ganamos.- Le fue contando el peli-purpura a su madre, mientras igual tomaba asiento.

- Eso es genial, hijo. Desde siempre has Sido bueno en el baloncesto.- Le dijo con una sonrisa Miyako.

- Eso me dicen muchos.- Dijo Kouta algo desanimado. Aquello no pasó desapercibido por la mujer rubia.

-¿Ocurre algo, hijo?-

- No es nada.- Le respondió Kouta.

- Vamos, hijo. Sabes que puedes contarme cualquier cosa.-

Kouta ya rendido estaba por decirle a su madre. Pero se ve interrumpido cuando la puerta principal se abre y ambos oyen una voz femenina y conocida.

-¡Ya llegué, familia!-

-¡Elizabeth!- Dijo con alegría Miyako yendo hacia su esposa que era una mujer de cabello café oscuro, piel no tan pálida como la suya, y ojos igualmente cafés.

- Hola, amor.- Le dijo la de cabello café, mientras abrazaba a Miyako.

- Bienvenida.- Le dijo Miyako que le correspondió al abrazo.

Ambas se besaron con pasión, pero a la vez con amor. Las dos habían olvidado por un momento que Kouta se encontraba allí, observando como ambas se compartían su amor.

Cuando ambas reaccionaron, miraron algo apenadas al chico.

- Disculpa, hijo.- Se disculpó Miyako. -¿Qué era lo que me tenías que decir?-

Kouta sonrió levemente y negó con la cabeza. - No es nada. Es un tema poco importante.-

-¿De qué estaban hablando los dos?- Preguntó Elizabeth sin entender.

- No era nada. Solamente quería decirle a mi madre que hoy tuve un buen día.- Dijo Kouta que no dejó de sonreír. - Me voy a mi habitación, tengo que hacer algo.-

Kouta sin esperar alguna respuesta de sus madres fue subiendo a su habitación.

"Que incómodo. ¿Así se comportan las parejas?" Pensó algo avergonzado Kouta. En serio un vago recuerdo de cuando era pequeño vino a su mente.

Recuerdo:

Kouta se encontraba volviendo de la escuela. En ese entonces tenía siete años. Cuando entró a la casa se le hizo raro que estuviera tan silencioso, pero en ese momento escuchó unos ruidos extraños. Venían de la habitación de su madre y madrastra. Él fue hacia esa habitación, mientras esos extraños ruidos se hacían más fuertes.