(JOKER X JOKER) Arthur Fleck X Jack (el Bromas)

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Lo hice, alcé el arma y disparé a Murray en la cabeza sintiendo una gran adenalina por todo mi cuerpo.
El público corrió horrorizado y me quedé a solas con las cámaras televisivas aún encendidas y el sonido de la policía acercándose desde la distancia.
No tardaron en capturarme,  los policías me rodearon y me llevaron a la fuerza hacia el coche policial.
Tras el vidrio podía observar toda la ciudad en llamas,  una mueca de felicidad se formó en mi rostro maquillado,  me sentía en un profundo extasis hasta que un duro golpe me dejó medio inconsciente en el asiento.
Tras el fuerte pitido dentro de mi cabeza podía escuchar varias voces rodearme para después sacarme desde la ventana sin delicadeza.
Mi piel estaba entumecida y el tacto de esas manos recubiertas en cuero me hacían sentir aún más mal,  pero pronto me recostaron de nuevo y sentí un motor rugir a todo volumen a través de la calle.
Abrí los ojos lentamente y lo primero que pude ver fue ese rostro blanco de nuevo.
Mi cabeza estaba recostada en sus piernas y sus manos aguantaban rígidamente mi mentón y con la otra acariciaba mi pelo.
Gemí por el dolor y el Joker miró mi rostro mientras sonreía orgulloso.

- Por fin te has despertado. - Me dijo mientras intentaba alzarme confundido.

- ¿Donde estoy?. - Me encontraba muy mareado en ese momento,  pero el no me dejó moverme del sitio y volví a colocar mi cabeza en sus piernas,  no me contestó solo me mimó con caricias en mi rostro mientras hablaba con alguno se sus lacayos.

Pronto el motor paró en seco y todos los hombres enmascarados del furgón empezaron a dispersarse, escuche el sonido de una puesta metalica abrirse y varias voces gritar ordenes en la lejanía.
- Ya hemos llegado, no te preocupes ya me encargo yo de ti. - Deslizó sus manos por debajo de mi cuerpo y me alzó como si fuera la mismísima Blancanieves.
Si no fuera por el malestar que sentía forcejearia, pero sólo pude dejar que me llévese donde el quería.
Entramos en una edificio y recorrimos varios pasillos, pronto paramos en otra habitación y volvió a recostarme,  pero esta vez en un colchón suave y cálido.

El Joker agarró una silla y se sentó mirándome fijamente.
- Tenía grandes expectativas contigo,  pero las has superado de una forma asombrosa. - Me dijo sonriendo y recostando sus hombros en la cama.- Me extrañó que no me fueras a buscarme,  pero veo que no necesitabas mi ayuda en nada.

- Necesito un cigarro. -  El  obedeció inmediatamente y puso en mi boca un cigarrillo y lo prendió.

- Podría curarte esas heridas, pero se ven demasiado jodidas, aunque una vez hice de enfermera. - Dijo mirándome la cara y negando lentamente. - No, efectivamente necesitas a alguien que sepa, no voy a dejar que sufras riesgos. -

Se levantó de la silla y se acercó a la puerta y llamó a alguien.
Un hombre encapuchado lo escuchó atentamente y asintió.

Pasó un media hora y vi a un hombre en bata blanca acercarse a mi.
Su expresión era de puro horror y el Joker se asomo detras apuntando al señor con un revolver.

- Mira lo que he conseguido para ti! El mejor doctor de toda la ciudad. - Río mientras empujaba al hombre hacía mí.
El señor se inclinó lentamente a mi rostro y se dispuso a desinfectar y vendar.

Cuando el hombre acabo dos lacayos se lo llevaron a través del pasillo y no volvi a verlo de nuevo.