Había un motociclista que lo llamaban cuyo y llego un chino a la ciudad y cada vez que pasaba ese chino decía hola señor culo y al día siguiente paso otra vez y seguía diciéndole al señor culo y el señor cuyo se puso molesto y se compró dos pastores alemanes y cada vez que pasaba ese chino, le soltaba a los perros y el chino se puso molesto y lo fue a denunciar y llega y le dice al policía yo quiero hacer una denuncia el policía del dice si dígame chino y el responde: es que me molestan los pelos del señor culo y el policía le dijo: bueno aféiteselo
