The Hat Fic [TaeSeok]

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"Tae-Tae, ¿podemos tener un hámster?", cuestioné mordiendo mi labio inferior, las verdad es que siempre he querido tener uno, pero mi compañero piensa que no sería capaz de cuidarlo.

"Hyung, ya hablamos de esto, no lo cuidarías como se debe. Ni siquiera puedes cuidar de ti". Solté un gruñido mientras lo miraba feo, ¿qué le pasa? Al parecer cuando dice ese tipo de cosas, olvida que soy mayor y que he vivido sólo antes...

Además, tener una mascota no es una mala idea, aún así decidí no pelear. Taehyung era terco y no cambiaría de opinión.

Visitaría la ciudad más tarde, así que decidí cambiarme. Me puse unos vaqueros ajustados, y una camisa roja, para después disponerme a salir.

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Finalmente terminé de comprar la comida que faltaba en nuestro refrigerador y saliendo del centro comercial me encaminé a la parada del bus, pero la curiosidad me pudo y terminé dirigiéndome a la tienda de animales más cercana.

No pude resistirme cuando, al entrar a la tienda vi una jaula que contenía a un pequeño y peludo hámster de color blanco y negro. Costaba sólo 13 dólares y era demasiado tierno como para no llevarlo. El hámster y una linda jaula se irían conmigo, estaba decidido.

Llegué a la parada justo cuando el autobús estaba a punto de irse.
Pagué mi pasaje y abordé, no pude evitar sonreír al voltear a ver al animalito que había colocado en el asiento a mi lado.

Comprar ese hámster era la mejor decisión que pude haber tomado, o eso pensé.

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"¡Tae!", grité al llegar a casa, "¡ven a ver lo que he comprado!" él llegó con rapidez a la puerta delantera a través del pasillo.

"¿Qué pasa?", levanté con emoción y una gran sonrisa en mi rostro la jaula que contenía una tierna bola peluda acurrucada en un rincón.
Pero mi felicidad duró poco al ver como la expresión de su cara cambiaba de ser una inocente y dulce a una jodidamente seria como el infierno, había un destello de maldad en sus ojos.

"Es hermoso, me gusta, supongo que me equivoqué por completo sobre no tener uno."

Sonaba genuino, pero había algo en la forma en que lo dijo que me hizo sentir incómodo.

"Entonces, ¿cómo se llama?" preguntó.

"¿Podemos llamarlo Striker, por favor? Siempre me ha gustado ese nombre." dije con la emoción aún palpable en mi voz.

"Seguro" su respuesta fue fría y cortante.

¿Qué le pasaba? Me encogí de hombros, me encaminé a mi habitación, y al llegar coloqué la jaula de Striker en la mesita de noche.

Eran apenas las 9:00 PM pero me sentía un poco mal y además tenía sueño, así que me puse mis pantalones de pijama y me metí en la cama.

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Me desperté en medio de la noche debido a la increíble cantidad de frío que estaba sintiendo, abrí los ojos mientras intentaba mover mis manos para tallarlos y, ¿qué carajos?

Comencé a entrar en pánico cuando al fin el sueño se disipó y fui consciente de mi propio cuerpo.

Podía sentir que estaba completamente desnudo y con sogas atándome a una silla, por inercia volteé hacia todos lados, examinando el cuarto y buscando algo que me ayudara, entonces, a pesar de la poca luz que se filtraba por las delgadas cortinas de la ventana para iluminar la habitación, lo vi...