baby 丼 kookmin.

capítulo 01

Jimin había comenzado a notarse gordo en las últimas semanas, supo que había un problema cuando los jeans que solían quedar flojos en su cintura ahora no cerraban, y el botón, que había sido abotonado casi por la fuerza, parecía que en cualquier momento estallaría.

El de hebras ligeramente rosadas se miró varias veces en el espejo, su panza no parecía demasiado grande, había estado comiendo demasiado pero no lo suficiente como para engordar. Jungkook rió al entrar a su habitación y verlo con un puchero en sus labios mientras se inspeccionaba frente al espejo.

—¿Hay algún problema, cariño? —el menor intentó abrazarlo, pero el pelirosa no tardó en alejar sus brazos y mirarlo con el ceño fruncido. Jungkook palideció, ¿acaso había hecho algo y no lo recordaba y ahora Jimin estaba enfadado con él?

—¿Crees que me veo más gordo? ―Jungkook estuvo a punto de echarse a reír, aunque la mirada mortalmente seria de su esposo no le dejó ganas de hacerlo, no sabía que responder sin ofenderlo.

―¿Es una pregunta capciosa?

―No me quedan los pantalones que compramos hace una semana Jungkookie, ¡estoy engordando! ―Jungkook no comprendía nada de lo que estaba pasando, porque Jimin no era de las personas que se preocuparan demasiado por su apariencia, y de hecho, él lo seguía viendo igual de delgado, aunque su cara parecía un poco más rellena desde hacía un par de semanas atrás.

—Tal vez comiste demasiado ramyeon picante y tu estómago está inflamado bebé, yo te veo igual de precioso que siempre ―Jimin seguía teniendo un puchero en su rostro, y Jungkook sonrió enternecido, yendo a abrazarlo antes de que comenzara a llorar―. Aún si engordaras seguiría amándote tanto como lo hago ahora.

―Eres tan cursi, Jungkookie.

Jungkook rió dejando un beso sobre la frente del mayor y se fue, pues ambos habían quedado en salir ahora ya que el menor al fin tenía tiempo libre debido a sus vacaciones, dejando que Jimin se cambiara mientras él ordenaba un poco su departamento.

El pelirosa salió un par de minutos más tarde.

―¿Ese es mi pantalón? ―preguntó sorprendido Jungkook al ver las piernas de Jimin, el pantalón había sido doblado de la parte de abajo un poco, haciendo que las piernas del otro se viesen más delgadas.

―¡Es lo único que me cierra, Jungkook!

Jungkook se limitó a reír por lo bajo al ver al mayor irritado, lo tomó de la mano y dejó un beso sobre su mejilla, saliendo rumbo al restaurante en que habían hecho la reservación.

　　　　　 　　　　

　　　　　　 　　　　

　　　　　　 　　　

₍  ♡  ₎

　　　　　　 　　　

　　　　　　 　　　

　　　　　　 　　　
　　　　　　 　　

―No puedo creer que le hayas tirado el agua a la mesera, Jimin, ¡fuiste muy grosero! ―Jungkook cerró con demasiada fuerza la puerta detrás de sí, Jimin entró muy enfadado a su hogar.

―¡Pues tú parecías demasiado tranquilo al ver que te estaba coqueteando, idiota! ―Jimin le gritó sin dejar de caminar hasta su habitación, sacándose la ropa a mitad de camino con Jungkook recogiéndola mientras lo seguía.

Jimin se encerró en el cuarto de baño y Jungkook suspiró del otro lado, aunque no tardó en preocuparse al escuchar al mayor devolver la comida en el retrete, intentó abrir la puerta pero estaba trabada. ―¡Jimin, déjame entrar! ―gritó golpeando con el puño la puerta.