Inicio De Una Leyenda: Jonh's origins

"Al Fin..."

El maestro Adler, Eko y yo nos encontrábamos comiendo la gran cantidad de comida que  mama había hecho para nosotros, Eko… digamos que tenía mucha hambre después del entrenamiento ya que comía como si su vida dependiera de ello, se acabó platós repletos de comida en segundos como si no fueran nada.

El maestro Adler y mis papás observaban su manera de comer con una sonrisa nerviosa expresada en sus rostros. En cambio a mi, a mi, a mi me valió verg… yo seguí comiendo tranquilo como si nada pasara.

Mis papas y el maestro Adler enfocaron su atención en mi porque les sorprendía mi tranquilidad al lado de la forma de comer de Eko, y no se de que se sorprenden, eso es algo que pasa casi todos los días.

Yo termine de comer y me sentía muy satisfecho, la comida de mi mamá es algo de lo que nunca me cansaré. Me levante de la mesa y camine hacia mi cuarto pero antes de eso el maestro Adler me detuvo para decirme algo.

–Ey, Jonh…

Voltee a verlo y el dejo su comida a un lado para decirme algo mientras me apuntaba con su tenedor…

–Toma tus cosas Jonh, prepárate, en unos momentos irémos a entrenar

Mi cara expreso alegría, mientras hacia una seña de victoria, corrí a toda velocidad hacia mi cuarto para tomar mi espada.

La razón de mi felicidad es que el maestro Adler nunca tiene tiempo de entrenarme ya que soy el menor y mi hermano al tener casi los 15 años de edad debe prepararlo lo mejor posible para poder salir de aventuras y viajar por el mundo, en pocas palabras un aventurero. Y ya que mi hermano debe ser preparado lo suficiente para no morir en el transcurso de sus aventuras el maestro Adler está siendo mas estricto, es por eso que el tiempo que libre lo utiliza para descansar.

Pero está es la primera vez en meses que volvemos a entrenar, así que debo dar mi máximo para demostrarle que en estos meses hice algo de provecho, y enorgullecer enormemente a mis papás.

–Al fin… yo, yo lo lograré…

Al fin encontré mi mi espada después de rato buscándola entre mi armario… es que esta hecho un desastre, ropa por doquier y desorganizada, ropa sucia en medio de la limpia, etc.

–Ehh… mmmmm… lo limpiare después

Sali corriendo de mi cuarto ignorando el desastre de mi armario, bueno no lo ignore solo me dio flojera limpiarlo.
Llegue a la sala y antes de tocar la puerta de salida, sentí una presencia escalofriante a mis espaldas, seguido de una voz.

–Jonh…

Yo sabía de quien era esa voz era de...

–No habrás dejado tu armario todo desordenado de nuevo verdad?…

Mi mama…
No quería voltear a verla, sabía que si lo hacía, estaría mirando a los ojos al mismísimo satanás.

Empecé a abrir la puerta lentamente mientras ella aumentaba su aura oscura, y en el momento exacto corrí como si mi vida dependiera de ello, estando lo suficientemente lejos me relaje, pero mi corazón latía fuertemente y sentía mucho miedo aún.

Después de un rato mi miedo no se calmaba, aun estaba muy nervioso, sentía la presencia de mi mama aún estando lejos de la casa.

Mientras tanto.

La madre de Jonh, miraba tranquilamente al horizonte justamente en la dirección en la Jonh escapo; dentro de ella yacía una ira inmensa, una furia insaciable.
El padre de Jonh sostenía su taza de té tranquilamente mientras le daba pequeños sorbos.

–Estas segura?

Le preguntó el padre de Jonh.

–Claro…

Ella respondió sin mirarlo a la cara y manteniendo su vista en la misma dirección.

Doblo un poco las rodillas sin despegar su mirada en dirección que tomó Jonh. Empezó a estirar el zapato que mantenía en su pierna izquierda hasta posarlo en la palma de su mano.

Y en un leve movimiento…
… este fue lanzado a toda velocidad en la dirección que mantenía su mirada.

El padre de Jonh un poco nervioso decidió dejar su taza y voltear a ver al fin a su esposa a la vez de dirigirle unas palabras.

–Creo que te excediste…

Con Jonh

–Uff… creo... que… a esta... distancia… estoy bien…

Muy apenas lograba decir eso, aun estoy muy agitado por la larga distancia que recorrí para salvarme de mi mama, ella puede ser muy tierna pero enojada es peor que mi papa.

–Eh?…

Lograba escuchar algo a la lejanía, no sabia que era así que di media vuelta y observe atentamente el lugar por donde llegue.
No había nada…

–Debió de ser mi imaginación…

La curiosidad era inevitable, juro que escuche algo, pero no había nada en esa dirección; mire a mi alrededor buscando respuesta alguna a lo que causaba ese extraño ruido pero al igual que al principio no había nada.

Bueno eso es irrelevante… lo que más me dio intriga fue que en cuanto escuche ese ruido sentí un miedo gigantesco.

Y lo más extraño, que a pesar de no haber encontrado respuesta a ese sonido no puedo tranquilizarme, aun siento mucho miedo, un miedo causado por una razón desconocida.

Decidí dar media vuelta(otra vez) y seguir mi camino tranquilamente...

Al menos ese era el plan…

Sin saber que pasó me encontraba tirado en el suelo, no sentía ni los brazos ni las piernas, no sentía literalmente NADA, no podía hablar, o moverme, con decir que muy apenas respiraba lo curioso… lo curioso es que estaba consciente.

Al menos no por mucho…
Porque poco a poco mis ojos empezaban a cerrarse hasta quedar completamente inconsciente…

…Podía sentir como mi cuerpo se sacudida un poco, lo que sí no podía sentir era el suelo en alguna parte de mi cuerpo; lo cual es extraño ya que si mal lo recuerdo cuando quedé inconsciente estaba en el suelo, quiero creer que alguien está cargándome, al menos eso pude deducir.

De repente deje de sacudirme, o sea lo que sea que me movía tanto dejo por fin se detuvo, trataré de ser más atento a mi alrededor, asi podré saber que pasa.
Ahora, ahora… ahora siento mojado pero por al menos puedo sentir el suelo y aparte no puedo respirar.

Espera…
Ahora que lo pienso mejor, se supone que estaba solo cuando me noquearon, en medio de un camino poco transitado, estaba dormido e indefenso…
…eso puede significar que.…

–Noooooo, soy muy pequeño para ser secuestrado, no, nuncaaa, ahhhh!!!!

Me levanto tan agitado por el miedo que ignore completamente mi al rededor.
Es entendible, cuando sabes que estas secuestrado te alarmas por el hecho de que algo te puede pasar como que te coman, que te maten, o peor…
… Si peor…
… tienda de regalos.

–Eres muy ruidoso niño.

Esa voz me es muy conocida, tengo miedo de voltear y saber que estoy equivocando pero se que tengo razón.
Un poco nervioso voltee la mirada, con la duda de si en realidad estaba en lo correcto… y si, al final si tuve la razón; era el…

–Estas listo para el entrenamiento… Jonh?…

Era el;… El maestro Adler.