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Y así siguieron su trayecto rumbo a casa de sus amigos en un silencio total, por parte de Jayden porque estaba pensando en todo lo que había escuchado y por parte de Kevin, no quería molestar a su amigo porque lo veía muy serio y molesto.
Al llegar a la casa, Jayden dudó en entrar, ya que no había vuelto a ver a Mia desde la graduación y no sabía que pasaría al verse de nuevo. Kevin al verlo lo animó y como sabían que Emily les había dicho que amigos como ellos no necesitaban tocar, buscaron la llave debajo de la roca falsa y sin más entraron y al hacerlo se toparon con la rubia que irradiaba un bello esplendor por su avanzado estado de embarazo.

"Hola Emily, ¿Cómo has estado?, ¿Y Mike?, ¿Y Mia?"

"¡Kevin, Jayden!, ¡Qué alegría verlos!, Pues estoy bien y embarazada, Mike fue comprarme unas hamburguesas del McDonald's porque se nos antojaron a mi bebé y a mí y respondiendo a tu última pregunta Kevin, Mia está nadando en el arroyo que está aquí cerca, pero no ha de tardar, pero cuénteme, ¿Cómo les ha ido?"

"Bueno, pues..., ¿Mia?"

"¿Jayden?, ¿Kevin?, Hola, ¿Cómo están?"

"Pues bien, estamos bien, y wow Mia, te ves muy bien." Dijo Jayden un poco nervioso.

Mía por su parte, no sabía como tomar su comentario ya que lo dijo de una manera un tanto rara y frívola.

"¿En serio?" Dijo Mia poniendo sus manos en la cintura en posición de jarras lo que hizo que Jayden se pusiera más nervioso, ya que ella llevaba un traje de baño y lo único que la cubría era la toalla que llevaba en sus hombros.

"A lo que me refiero es a que te ves genial por... La alegría que traes por tu compromiso, y por cierto, felicidades por las nupcias venideras." Dijo haciendo un esfuerzo sobrehumano por solo verla a los ojos, ya que en la posición en la que estaba y el bikini rosa que cargaba se asentaban mucho más su atributos como su prominente busto, su cintura tan definida y sus tan moldeadas piernas.

Kevin por su parte solo se decepcionó por los comentarios de Jayden y se golpeó la frente con la palma de su mano por la frustración que le causaba su amigo.

"Gracias, tú también te ves bien."

"Gracias y dime, ¿Cuándo conoceremos a tu prometido?, Porque solo hemos escuchado su nombre desde que se hizo noticia lo de su compromiso."

"Bueno, Troy dijo que estaba atendiendo algo con su hermano y su primo y no sé donde está."

Justamente al terminar de decir eso se pudo escuchar que alguien abría la puerta de la casa.

"Vaya, miren a quien tenemos aquí, Jayden, Kevin, que gusto verlos."

"Hola Mike." Dijeron al unísono.

"Y Mia, mira a quien me encontré en el camino." Dijo para luego hacer pasar a...

"¡Troy!" Se abalanzó Mia sobre él muy entusiasmada.

"Hola bebé, hola a todos." Saludó muy cortésmente a todos, "ten esto es tuyo, es por compensarte el que te haya dejado en el museo hace rato." Dijo dándole un ramo de rosas.

'Esa voz... No pude ser posible, ¿O sí?'

"Hola." Devolvieron el saludo muy animados, aunque unos más que otro.

"Gracias Troy, pero no debiste molestarte."

"No te preocupes hadita, cualquier cosa es poco para el amor de mi vida." Dijo en un tono un tanto soñador, lo cual causaba la molestia de cierto chico.

"Mi amor, te presento a Kevin Jones y a Jayden Shiba."

"Es un honor conocer finalmente a las grandes promesas olímpicas, al futuro Michael Phelps y... A mi mayor inspiración, un honor conocerlo gran maestro Shiba." Dijo todo con un tono de admiración que sonaba totalmente genuino, pero en la última parte hizo mayor énfasis e hizo una reverencia ante Jayden como si fuera su sensei, pero lo hizo con el debido respeto con el que se suele hacer.

"¿Maestro... Shiba?" Preguntó esté muy extrañado.

"Claro, usted fue mi inspiración para continuar mi  práctica de artes marciales cuando me estaba dando por vencido aunque claro, tenemos la misma edad eso no impidió que yo lo idolatrara maestro, claro, es triste saber que ya no está en el equipo olímpico de taekwondo."


"¿Cómo...?, ¿Ya no estás en el equipo olímpico?" Preguntó Mia muy intrigada por lo que acababa de escuchar.

"Bueno, la verdad es que no, lo dejé hace tiempo y me dediqué más a las artes marciales mixtas y he entrado a distintos torneos pequeños." Dijo Jayden un poco nervioso.

"Bueno hadita, eso no le impide ser alguien digno de admiración."

"Tienes razón, pero, ¿A qué más viniste cielo?"

"Bueno, también te quería invitar a comer."

"¿Ya resolviste tus asuntos con tu hermano y tu primo?"

"Eso no era nada importante hadita, Jake y Orión me dijeron eso sólo porque querían decirme que querían hacerme una despedida de soltero."

'¿Jake y Orión...?, ¿No eran esos los nombres de las personas que estaban en el bar?, ¿ Coincidencia?, Esto encaja demasiado bien para ser coincidencia, pero necesito más pruebas.'

"Bueno, ya habrá momento de hablar de eso, me iré a arreglar para que nos vayamos pronto y regresemos pronto, no quiero dejar desatendido el restaurante."

"¿Por qué no le dices a Shelby que se haga cargo del restaurante sólo por esta noche?, No en balde es tu mano derecha hadita."

"Tal vez lo haga, pero mientras lo pienso, los dejo solos para que se conozcan un poco más."

"Te estaré esperando hadita."

'¿Cuál es la maldita necesidad de llamarla por ese apodo tan estúpido?'

"Eres muy afortunado, espero y sean muy felices." Dijo Jayden tratando de esbozar una sonrisa que pereciera genuina.

"Modestia aparte es verdad eso, la conocí cuando pasaba un muy mal momento en mi vida, mi antigua prometida murió cuando un imbécil nos quiso asaltar y se le escapó un tiro."

"Lo siento mucho." Dijo con total honestidad.

"Gracias, pero creo que ella fue quien puso a Mia en mi camino, ¿Sabes?, La conocí cuando cuando ella estaba pasando por una depresión porque alguien a quien amaba mucho le rompió el corazón." Dijo sin mirar a Jayden, y con un tono que transmitía un poco de lástima, pero también al decir eso, también causó que en el interior de Jayden hubiera una mescolanza de emociones, por un lado estaba furioso porque sabía perfectamente que él pudo ser quien uniera su vida con Mia, pero dejó pasar esa oportunidad y por el otro lado, también estaba furioso con Troy por decir eso, ya que nadie le daba el derecho de sacar ese tema a relucir.

"Bueno, creo que ya me voy, ya sabes lo que dicen, tres son multitud."

"Claro."

"Si ves a Kevin, dile que estaré en el parque por si acaso."

"Está bien, cuidate."

Y así Jayden salió a toda prisa de la casa de sus amigos, estaba realmente iracundo por todo lo que había escuchado, y sabía que irse era la mejor idea, ya que si se quedaba, buscaría una excusa para salir y espiar la cita de Mia y no quería arriesgarse a semejante idiotez.

Continuará...

Una nueva oportunidad para amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora