Torpe » jimsu [adap.]

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31 de octubre de 2076

Jimin miró al niño frente a él con una ceja alzada, lo vio una vez más de arriba a abajo y entonces frunció el ceño.

Se supone que era halloween y desde muy temprano los niños habían llegado a su casa pidiendo dulces, pero el niño frente a él, de no mas de nueve años, no tenía disfraz, si no que sólo estaba vestido con pantalón de vestir, camisa de manga corta y una corbata, el plus eran los lentes cuadrados de nerd en su rostro.

Jimin entonces ladeó la cabeza.

—¿Eres un nerd o...? —dejó la pregunta al aire, esperando a que el niño le contestara, pero este lo miró con mala cara.

—Señor, eso es ofensivo, sólo deme mis dulces.

Jimin lo miró con la ceja alzada, de pronto parecía ofendido.

—No hasta que me digas que diablos eres, niño.

El niño entonces se cruzó de brazos y se miraron fijamente durante casi un minuto. Después de todo alguno tendría que ceder.

—De acuerdo, señor. —accedió el niño, por que obviamente Jimin no lo haría—, Si le digo de que me disfrace me dará dos puños de dulces ¿Trato?

Jimin dejó salir un jadeo.

—Un puño de dulces y un chocolate, no más.

YoonGi, que había escuchado toda la conversación desde la cocina, gritó—: ¡Jimin! ¡Ya dale sus dulces!

—YoonGi, por favor, estoy tratando negociar por acá. —solo escuchó un bufido como respuesta antes de volver a enfocarse en el niño frente a él.

—Un puño y dos chocolates.

-Sigue intentándolo, continúo con mi oferta.

El niño bufó y rodó los ojos.

—De acuerdo, de acuerdo, ponga los dulces aquí. —dijo extendiendo su bolsa de tela frente a él. Jimin puso el puño de dulces dentro de la bolsa, pero se quedo con el chocolate. El niño volvió a rodar los ojos—, Soy un Godinez ¿Feliz?

—¡¿Qué?! —dijo Jimin asombrado antes de empezar a reír a carcajada suelta—, ¡Un Godinez! ¡Jamas lo hubiera pensado! —tomó otros dos puños de dulces y un chocolate extra y los dejo caer dentro de la bolsa—, Te los mereces, campeón, es el mejor disfraz que he visto en todo el día.

El niño le sonrió antes de decir—: Gracias, abuelo. —entonces dio media vuelta y salio corriendo de ahí.

Jimin chasqueó la lengua.

—Ya no hay respeto.

—Pero si sí eres un abuelo. —le dijo YoonGi sonriendo a sus espaldas.

Jimin lo miró sobre su hombro antes de darse vuelta y enfrentarlo, cerrando la puerta de paso.

—Abuelito dime tú. —dijo sonriendo pícaramente y elevando las cejas.

YoonGi no pudo evitar reírse.

—¡Oh por dios! ¡Jimin! —lo miró con una sonrisa y lo apuntó con un dedo. —Sólo intentalo y te va a dar un infarto. —dió media vuelta para regresar a la cocina, todavía riendo y negando con la cabeza.

—Oye, YoonGi. —este se detuvo y lo miró sobre su hombro.

—¿Si?

—Tienes la risa más bonita del mundo.

YoonGi inhaló profundamente antes de regresar sobre sus pasos y abrazarse de Jimin. Luego le dió un beso de piquito y le sonrió con complicidad para después regresar a la cocina y terminar de preparar la cena.

uno.