¿es esto amor?; studoc

lindo cuando duermes

La espalda de Stuart dolía, el colchón se hundía bajo él y Murdoc ocupaba un amplio espacio de este, debido a eso compartían una cercanía preocupante. Aquella noche Stuart no podía dormir, la situación en que vivían le molestaba, pero no creía que fuese una buena idea hablarle de eso a Murdoc en ese momento: él ya dormía desde hace bastante. Además no quería que comenzara a gritar, podría despertar a los gemelos raros que rondaban por los pasillos de Kong.

Stuart intentó recostarse de lado, se apoyo en su brazo izquierdo mirando hacia el mayor, cuando no estaba enojado o gritando se veía lindo. El peliazul sonrió y cerró sus ojos nuevamente intentando dormir. A Stuart le parecía muy curioso que para dormir tuviese que fingir estar durmiendo, abrió sus ojos con aquello en mente, cuándo le gustaría conversar de eso con Murdoc, se lamentó.

Soltó un bufido con cuidado de no hacerlo en voz muy alta. Volvió su negra mirada hacia Murdoc, realmente era adorable, 2D adoraba sus ojeras, lo hacían ver como alguien profundo e interesante, bohemio sin duda. En sí mismo solo lo hacían ver más muerto y miserable de lo que ya era. Qué triste, pensó, me gustaría hablar de eso con Murdoc.

Murdoc casi siempre lo hacía sentir mejor, sobre todo después del segundo accidente: Él le había salvado la vida, Stu le debía su alma a Murdoc.
Durante un tiempo estuvo preocupado por sus abolladuras, ¿Se veían muy mal? ¿Debía usar lentes de contacto? ¿Debía visitar un doctor? No estaba seguro, pero Murdoc decía que se veían bien, que lo hacían lucir "guapo".

Stu sintió un repentino estremezón en su estómago y el rubor se asomó en sus mejillas; Murdoc sí que era guapo, pensó. Él lucía muy bien casi todo el tiempo, o bueno, al menos 2D sentía que lucía bien casi todo el tiempo.

Había muchas cosas de Murdoc que le gustaban a Stuart, esa misma madrugada había descubierto una nueva: el como dormía.
Murdoc mientras dormía se veía tan tranquilo, sus mechones azabaches descansaban sobre su frente e incluso sus rectangulares cejas se alcanzaban a ver un poco. Qué intriga, las cejas de Murdoc. Siempre se había preguntado cómo se veían.

2D se acercó un poco más, tratando de no mover mucho la sábana que los cubría, cuando estuvo lo suficientemente cerca, estiró el brazo y lentamente levantó el cabello en su frente revelando sus cejas, rectas, largas, grandes y muy negras.

Qué lindo, pensó Stu y, cuando de a poco alejaba su extremidad, Murdoc se movió de su lugar, girando hacía la izquierda, justo en dirección al peliazul.
Sintió su mano fría sobre la espalda y nuevamente, como si de terremoto se tratase, su estómago se agitó.

Qué situación más vergonzosa, estaba tan cerca de él que podía sentir el aroma a menta de la pasta dental mezclada con la cerveza barata qué bebió justo antes de caer dormido. 2D no estaba seguro si estaba ebrio o no, aunque de estarlo no se sorprendería.

Stu sabía que con un simple movimiento la mano de Murdoc volvería a su estado original, sobre su panza descansando, pero, por alguna razón, quería quedarse así un poco más. Cerró los ojos con calma y pensó en que no le desagradaría estar así con él a veces.

Pero, un momento, ¿No era eso extraño... Y un poco gay?
No estaba seguro y su cabeza divagó en la idea de si él podía ser gay y no saberlo, luego de algunos segundos fue interrumpido por la voz balbuceante de Murdoc.

--No... Stu no es un caballo... --y demás frases mezcladas con sonidos sin sentido. 2D no pudo evitar reír un poco en voz baja.

Luego volvió el silencio a la habitación y Stuart se enfocó nuevamente en el rostro del mayor, sus ojos cerrados pasivamente y su boca entreabierta, la calidez que su cuerpo emanaba.
Tal vez Stuart pensaba en todas esas cosas porque aquella tarde Murdoc había tomado una ducha, tal vez eso lo volvió tan atractivo de pronto.

Stuart sonrió.

--Stuart, no... está bien... guapo... --2D sintió un escalofrío subir por su columna vertebral.

Estaba soñando con él, y en su sueño lo estaba llamando "guapo", qué tierno, pensó.

"Murdoc es muy lindo y tierno, es adorable, hasta podría besarlo"

Su corazón comenzó a latir con rápidez con esa idea en la cabeza, y finalmente, aunque no estaba seguro del todo, la idea recorrió su mente:

¿Es esto amor?

gracias por leer