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Viernes, bendito y lindo viernes.

Realmente no se porque, pero esta semana se volvió agotadora, no tenía animos, no dormí ni comí bien, mentiría si dijera que en algunas ocaciones me perdí clases para encerrarme en el baño y llorar.

Me sentía mal, me sentía exhausto, ¿motivo?, me alejé de ellos, me aleje de todos los que en algún momento creí que eran mis amigos, me canse de buscar y dar tanto sin recibir, también me canso, tambien soy persona, también tengo sentimiento.

Me encontraba encerrado en el baño, había perdido las dos ultimas horas de clases, simplemente no quería saber de nada, solo quería ir a casa y meterme en mi cuarto y no volver a ver la luz hasta el lunes.

Mis ojos dolían, me ardían de tanto haber llorado, me sentía roto, me sentía humillado, resfregue mis ojos para luego peinarme un poco trata de tranquilizarme, faltaba medía hora para que acabara la jornada de el día de hoy, necesitaba tranquilizar y poder llegar a casa sin derramar una lágrima.

Sentí como la puerta de el baño se abría, simplemente me quede callado mientras esperaba a que la persona que entró hiciera sus necesitades y me dejara llorar en paz.

Escuché como una llave era dada y el agua corría, después sentí unos pasos y escuché como la puerta se cerraba, dejé escapar un pequeño sollozo, necesitaba calmarme pero no podía.

Bajé la mirada a mis zapatos y vi como una pequeña nota era lanzada, mentiría si dijera que mi alma no sintió como la apretaban y se partía más, me agaché y la tome entre mis manos aún llorando.

"Es una vida hermosa
Me quedare a tu lado
Es una vida hermosa
Me quedaré justo detrás de ti
Hermoso amor
Si estoy contigo bajo este cielo
Simplemente respirar solo me hace feliz
Es una hermosa vida
Un hermoso día."

Al terminar de leer solté un sollozo desgarrador, mi garganta llego a doler, sentía como algo raspaba esta y sentía un gran nudo, de forma rapida me levante y abrí la puerta de el baño en el que me econtraba.

Al abrirla me encontré con Yunho parado fuera de este, simplemente, mis lagrimas comenzaron a caer y no paraban, lo mire, lo miré a los ojos y mi vista se cristalizó a mas no poder.

Prácticamente me lancé en sus brazos, éste me tomo y me sujeto como si fuera la cosa más frágil del mundo, su simple toque me hacía sentir protegido, el me hacía sentir protegido.

"Y-yo..." Por mas que trate de decir algo me fue imposible, las palabras no salían y mi voz tampoco.

"Tu eres lo mejor que alguien puede tener en su vida. Tu eres la persona que mas brilló tiene sin necesidad de robarle el brillo a otro. Tu eres la persona que se encargó de hacérme sentir mucho cuando sabias poco. Tu eres increíble ante los ojos de las personas correctas." Simplemente lo mire, uno de sus brazos rodeaba mi cintura mientras que su otra mano acariciaba mi mejilla.

Abrí mi boca para decir algo pero simplemente no pude, las palabras seguían sin salir, mi voz no estaba, estaba tan rota que no sonaba.

Era ahora o nunca.

De forma rapida pase mis brazos por sobre su hombro y de puntillas lo besé, me adueñe de sus labios, sus delgados y rosados labios para luego comenzar a mover los mios sobre los sullos.

Acaricié su cabello, me separe de el y aún de puntitas apegue mi frente a la suya, lo necesitaba, el era todo lo que necesitaba por ahora, solo el.

𝙥𝙪𝙧𝙚 𝙡𝙤𝙫𝙚'ღ'-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora