14

4 0 0
                                    

Seguimos reuniendonos tres o cuatro veces mas.

Siempre él me hacia reir y sonrojar.

¿Desde cuando me sonrojo?

Estaba dejando de pensar con el cerebro.

Y había comenzado a pensar con el corazón.

Para Ti Que Me Amaste A Pesar De TodoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora