12. Frente a la adversidad, belleza (+18)

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Bakugo y Kirishima salieron a la puerta de la clandestina sala de emergencias ubicada en Bunkyo y un coche ya los estaba esperando. Un desconocido le dio las llaves al cenizo y éste no dudó ni por un segundo en sólo subir sin cuestionar absolutamente nada. 

Era de suponer que Aizawa llamaría a "la carrocería" tras estar tanto tiempo colgado al móvil. 

Kirishima no sabía si su percepción del tiempo estaba alterada por todo lo sucedido o por lo rápido que conducía su compañero alfa, pero sí sabía una cosa: nunca había sentido tanto miedo como ese día. 

Tenían que sacar de esa zona a Shoto de la manera más discreta posible, pero acababan de tener una batalla campal con una cantidad "promedio" de subordinados. ¿Qué sería de ellos si Enji Todoroki movilizaba a su gente?

Sus latidos comenzaron a ser notorios. Sus palmas sudaban. 

Nunca había tenido dudas antes de su fuerza ni de sus destrezas, pero ¿estaría a la altura de la situación? No quería que Bakugo resultara herido, él ya tenía una familia a la cual regresar, pero realmente adoraba a Deku y no quería verlo llorar por perder a su amigo...

ー YA DEJA DE PREOCUPARTE, ME PREOCUPAS A MI ー gritó girando bruscamente por la ultima calle que los conduciría hacia Shoto.

ー ¡Lo siento, lo siento! ー Se disculpó el pelirrojo ー Estoy muy preocupado. Ambos se separaron de nosotros y mira como terminó Kami... yo... 

ー De ninguna forma pienses que algo de esto es tu culpa. 

Las palabras de Bakugo eran firmes, sin titubeos. Kirishima siempre admiró su tenacidad, por lo que en ese momento pudo esbozar una mueca en aprobación.

El cenizo bajó la velocidad cuando comenzó a adentrarse en donde hacía casi nada de tiempo habían estado todos cautivos. A lo lejos podía verse claramente una considerable cantidad de patrullas de la policía local, muchos oficiales haciendo preguntas, tomando testimonios. 

La casa de la señora Shuzenji no quedaba muy alejada del lugar de lo hechos, por lo que se vieron obligados a dejar el coche lejos y caminar discretamente. 

Cuando estaban a punto de tocar en la puerta de entrada, un hombre de mediana estatura y cabello oscuro abrió de golpe. Ambos se ocultaron de inmediato. 

ー Muchas gracias por su ayuda, señora Shuzenji.

ー Por nada, oficial Tsukauchi ー respondió con voz de tierna ancianita ー Lamento no poder ayudar más en su investigación. 

La mujer hizo una reverencia y el policía la imitó. Una vez que se aseguró que ya no había nadie cerca, la mujer volteó hasta el costado de la propiedad en donde Bakugo y Kirishima se escondían.

ー ¡Katsuki, buen muchacho! ¡Regresaste! ー Sonrió la anciana ー Adelante. Tu amigo puede pasar también. 

Esta persona no hizo ningún tipo de preguntas ni se opuso a todo lo que sus ojos veían suceder. Ella era más que amable... era como una especie de ángel que de la nada los puso a salvo en el peor de los escenarios que habían tenido hasta el momento como grupo. 

Condujo a ambos por un pasillo largo y finalmente los dejó en una habitación en donde Shoto se recuperaba de su herida. 

Natsuo estaba en una esquina del tatami, en la parte más cercana a su hermanito. No había parado de cuidarlo ni por un segundo; Kirishima puso de cuclillas y comenzó a envolver al herido en las sábanas que tenía alrededor sin despertarlo, mientras que el cenizo se le acercaba al exhausto hermano mayor para hablarle. 

Love can't be arranged [Ships sorpresa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora