Capítulo 3

139 9 0
                                    

Abrí la puerta de casa poco a poco y..

-¡BIENVENIDA SARA!.- Me dijeron Lidia, Blas, Carlos, Álvaro y Dani.

Tiré mi maleta al suelo y fuí corriendo a abrazarles. Les había echado tanto de menos.

-Chicos..- Les dije muy emocionada.

-Cuanto tiempo Sarita.- Me dijo Álvaro con esa sonrisa tan preciosa.

-Tenía tantas ganas de veros.

-Y nosotros a ti Sara.- Me dijo Dani con uno de sus fuertes abrazos

-No estará él también ¿verdad?.- Dije mirando a mis alrededores para ver si también había venido David.

-Tranquila, no le hemos dicho nada.- Me respondió Blas.

-Bueno, sentémonos a comer tarta que la he dejado fuera de la nevera y se va a hacer mala.- Dijo Lidia para evitar que nos pusieramos a hablar de ese tema.

Nos sentamos en la mesa y mientras Lidia nos servía los platos, pude observar como habían decorado la casa para darme la bienvenida. Había un cartel gigante en el que ponía "Bienvenida a casa Sarita" y tambien habia muchos globos por los lados, globos de colores muy bonitos.

Mientras nos comíamos la tarta, los chicos nos hablaban sobre sus nuevos proyectos acerca de la promoción del disco. Los nuevos conciertos que iban a hacer alrededor de España, las firmas de discos y las entrevistas. Incluso nos contaron algunas anectodas super graciosas que habían vivido. Nos lo contaron todo eso sin nombrar en ningun momento a David, porque no querían sacar ese tema, pero cuando se callaron un rato, quise aclarar una cosa.

-Ya está todo superado..-Dije con la cabeza un poco agachada.

No me respondieron.

-David lo está pasando mal.- Dijo Blas como si lo defendiera.

-Podríais hablarlo y solucionar las cosas de forma amistosa. Si no quereis volver no volvais, pero David necesita saber algo de ti.- Dijo Carlos con mucha seriedad.

-Yo también lo he pasado muy mal, y antes de venir aquí me prometí a mi misma que no volvería a mirarle a la cara.- Dije muy decidida.

-Sara...-Dijo Dani.- Solo habla con él, esto le está afectando profesionalmente.

-No quiero.

-Sara, Auryn no es Auryn si falla uno, y David está muy deprimido, las Auryners se están empezando a dar cuenta.- Dijo Blas.

-Blas, he dicho que no. El ya es mayorcito, si yo he sabido pasar página, él tambien puede. O si no, que hubiera pensado antes acostarse con otra chica.

Cuando dije eso todos se quedaron callados, mirándome. Me hicieron sentirme mal.

-Joder, ahora voy a tener yo toda la culpa.- Se me llenaron los ojos de lágrimas, dejé el plato sobre la mesa y rápidamente me fui a mi cuarto cerrándo la puerta. Me tumbé en la cama y me puse a llorar.

....

A los 10 minutos, tocaron la puerta de mi habitación. Era Álvaro.

-¿Puedo pasar?.- Me preguntó.

-Haz lo que quieras.- Dije con un tono un pelín borde.

Álvaro pasó y se sentó a mi lado encima de la cama.

-Siento si algo de lo que hemos dicho te ha afectado.- Me dijo.

-Te he dicho que ya lo he superado.

-No. No lo has superado Sara. Si lo hubieras superado, seguirías con nosotros en la mesa.- Me contestó.

-Joder, Álvaro.

-Venga Sara, no es por defender a David, pero habla con él, lo necesitáis.

-No puedo..-Dije casi con ganas de llorar. Álvaro me abrazó.- Me hizo tanto daño..- Añadí.

-David me dijo que lo que te hizo nunca se lo perdonaría. Lo ha estado pasando mal, créeme.- Me dijo Álvaro.

-¿Pero porqué lo hizo, Álvaro? ¿Porqué?.- Dije mientras una lágrima recorría mi mejilla.

-Solo lo sabrás si hablas con él, Sara..- Dijo esto, y se levantó.- Te dejo aquí su número de móvil ¿vale?.- Dijo mientras me apuntaba en un papel el número.

Nos despedimos con un abrazo y se fué. 

Fui a la cocina y cojí algo de cenar. Lidia me había dejado una nota diciendo que llegaría un pelín tarde, porque se había ido a cenar con unos amigos.

Cené y me quedé en mi cuarto mirándo el papel con el número de teléfono que me dió Álvaro. No sabía que hacer, pensaba y pensaba si llamarle o no, hasta que finalmente, me quedé dormida.

No me olvides.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora