CAPITULO 7

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La tarde de la primera nevada, miraba desde la ventana como los pequeños copos de nieve cubrían de blanco cada espacio donde mirase, más allá los perritos corrían de un lado a otro mientras mi abuelo intentaba hacer que entrarán a la casa, reí por su rostro serio al ver que no le había el más mínimo caso, hasta que apareció mi padre llevándolos a todos dentro. Seguí mirando por la ventana más tiempo, el paisaje lograba capturar por completo mi atención y al oír las pisadas de alguien venir me enfoqué en la puerta esperando a que entrarán.

-Cielo, la cena está lista ¿Vienes? – asentí tomando la mano de mi madre al bajar hasta la mesa donde todos ya estaban en sus asientos esperando por mí, usualmente se me sentaba junto a mi padre, las ganas de comer no eran muy grandes, baje solo para compartir con mi familia, escuchar mientras reían o contaban sus historias las cuales aún me faltaban por escuchar, hasta que una logro captar mi atención, la vez en la que conocieron los padres de mi abuela.

-Recuerdo que mi madre decía que ellos solo se miraban la primera vez y sus amigos le decían que cuando se conectaban sus ojos cambiaban de color, yo también los vi un par de veces, ellos realmente se amaban.

- ¿Cómo cambiaban? Quiero decir ¿Cómo es que eso pasa? - la familia entera se giró a mirarme, me había mantenido callado toda la cena hasta ahora.

-Era una conexión que pocos logran tener, pero es muy fuerte, cuando tus ojos cambian de color es porque tu lobo se está presentando con la persona contraria, puedes ser tú en forma humana pensando que todo sigue normal, hasta que miras tus ojos y son de otro color, debe ser bonito ver como el lobo de alguien puede llegar a presentarse de esa forma.

-Pero ¿Los ojos de ambos cambian o sólo uno?

-Ambos, los ojos de ambos Lobos, si tu omega en este caso no está a gusto él no es capaz de salir de esa forma, es mas para el caso de los predestinados, mis padres lo eran, cuando pasa eso se entregan de corazón, como algunos dicen "Los ojos son las puertas del alma" cuando cambian los ojos también le entregas las llaves de tu alma- con aquello se me quito todo el apetito, aunque los ojos el chico rondaban en mi cabeza, los cuales nunca vi cambiar de color, sus ojos siempre fueron esmeralda desde que los vi.

Poco después llegó navidad mi día favorito solo porque puedo disfrutar aun más de mi familia, muchos primos, tíos, vienen a compartir en casa diálogo con ellos de todo aquello que no he hablado, junto con mis primos planeamos bromas hacia los más adultos y mi alma de niño sale a flote, suelo agradecer que existan fechas donde se puede reunir toda la familia porque si no jamás volvería a verlos.

Luego llego mi cumpleaños 25, un gran pastel fue preparado ese día por las manos de mis madres más hermosas, recibí llamadas de mis amigos decimándome un feliz cumpleaños además de recordarme que estaba envejeciendo, hicieron una pequeña fiesta para mi dónde Yoon Gi y Jimin llegaron de sorpresa por lo que no pude evitar llorar al apagar la velas. Mi familia amo a Jimin desde que el chico paso por la puerta y quien no podría amarlo, hasta Yoon Gi gruñía de vez en cuando por cómo se le acercaban, luego mi madre lo regañaba por egoísta y al otro día hicimos un tour por todos los terrenos para que Jimin pudiera conocer donde yo vivía antes de que fuera a Seúl. Y en la noche celebramos año nuevo todos juntos, deseando que todo mejorará, seguir avanzando y construyendo mi vida de la mejor forma, sin ataduras o disgustos innecesarios.

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Enero llegó de golpe con todo, el día 7 estaba listo para inaugurar mi nueva tienda de libros, remodelada completamente, muchas personas entraron de curiosas y luego terminaron llevando libros que no venían a buscar fascinados con solo mirar el lugar al cual yo veía alegremente, había pintado cada pared con una estación diferente del año y los libreros estaban lo más rústicos posible.

In Her Eyes 🐺KookV OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora