Capítulo 2. Nosotros Recordábamos

13 2 3
                                    

5 meses de noviazgo

Los últimos meses habían sido espectaculares. Aún seguíamos yendo a la playa, a parques, centros comerciales, incluso sólo caminar por las calles de noche.

Pero tiempo después, algo cambió. No quería salir, no quería que nos viéramos, no quería ni platicar por unos cuantos minutos. ¿Acaso estaba haciendo mal? A veces, las preguntas son complicadas y las respuestas son simples. No quiero el fin.

-Te quiero. -Dijo. Yo sólo temo que no sea así.

-Y yo a ti.

9 meses de noviazgo

-Hermoso, voy a salir con unos amigos al centro.

-¿Me vas a dejar solo este día? -Dice.

-Pero si ayer nos vimos.

-Si quieres, ven con nosotros.

-No, ya no quiero -se ha enojado-. Déjame.

Y nosotros seguíamos pretendiendo que duraría por siempre, pero yo verdaderamente caí enamorado de él.

11 meses de noviazgo

-¿Con quién estás? ¿En dónde? ¿Por qué se solamente se escuchan hombres?

-Amor, te dije que estaba en la fiesta de mi primo. -Le digo acercando más el celular para que logre escucharme.

-Es que me da miedo que te vaya a gustar alguien más.

-No, tontito, eso no va a pasar.

-Está bien -por fin se ha calmado-. Me avisas cuando llegues a tu casa. Te quiero ver.

Un año de noviazgo

-Oye Kai -se escucha morbo en su voz al otro lado del teléfono-. Esta noche tengo casa sola, ¿quieres venir?

-Lo siento, bebé. Esta noche trabajo.

-Agh... Ya qué. -Cuelga. Ni un adiós me pudo decir.

Eran las 7 PM y nadie venía a la farmacia, ni siquiera por unas banditas.

-Kai, puedes retirarte -grita mi jefe desde su oficina-. Nadie parece venir esta noche. Nos vemos mañana.

-¡Gracias, señor!

Me dirijo corriendo hacia la casa de Tay, ¡qué emoción! Las cosas habían mejorado por completo entre nosotros, habíamos cumplido un año y me siento seguro para lo que sigue.

Cuando llego, un escalofrío me recorre por todo el cuerpo. La puerta principal estaba entre abierta.

-¡Oh Dios! ¿Le habrá pasado algo? -Susurro mientras que rápidamente entro y me dirijo hacia la planta alta. -¿Tay? ¿Estás ahí?

-¡Aah! ¡Aah! -Entro y lo veo. Ojos lujuriosos, sudor por todo el cuerpo. Un chico en la cama...- ¡Kai!

Salgo corriendo de ahí. Un mar de lágrimas a mi paso. Gritos detrás de mí. Yo no escucho nada.

...

¿Cómo es que llegué a mi recámara? No lo sé. Pero agarro mi almohada y lloro hasta quedarme dormido. ¿Acaso no fui suficiente? ¿Qué tiene él que yo no? ¿Qué hice mal? ¿Por qué me hizo eso? ¿Cómo pudo? Ya Kai, sólo duerme.

Una llamada entrante me despierta. No contesto.

Otra llamada entrante, es él. Pero ni siquiera me molesto en revisar. Déjenme solo.

Actualidad

¿Qué habré hecho mal? Tal vez si lo hubiera perdonado no me hubiera dolido tanto.

Una llamada entra. Son dos por día desde que me engañó... ¿Por qué lo hizo? ¿Cuándo es que mi mente me va a dejar en paz? ¿Cuando acabará mi dolor? ¿Sanaré?

El primer amor duele, y no saben cuánto.

Fin.

Todo lo que fuimosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora