Orion
Me encontraba acostada en el sillón de la sala con un gran pote de helado de mis piernas y mirando una de mis películas favoritas, podrán decir que soy una perezosa, pero no es así estaba disfrutando mis vacaciones en mi pueblo natal porque la universidad me estaba comiendo viva, estaba sola porque mi mamá trabajaba tiempo completo como enfermera del hospital, no tenía papá y tampoco hermanos mi mamá me había criado sola; de pronto unos latidos perturbaron mi tranquilidad, era raro escuchar ladridos ya que en el barrio no habíamos muchas familias y las que habían no tenían perros así que decidí asomarme por la ventana para ver el causante de arruinar mi maravillosa tarde.
Pues habían llegado unos nuevos vecinos a la casa de al lado, esta casa llevaba deshabitada cuatro años desde que me había ido a la universidad que había sido a los 18, ya tenía 22 y estaba a un año de graduarme pero había decidido tomarme un semestre de vacaciones pero bueno volviendo al tema de los nuevos vecinos, vi a un niño como de unos seis años corretear con el perro por el césped de la casa ... que horror niños, los detestaba... el que parecía ser el padre bajaba las maletas del auto y la que parecía ser la madre las recogía y llevaba a la casa, y empezó a llamar a alguien -Robbin puedes ayudarme- , ¿Robbin? Acaso había otro más, de la casa salió un chico como de unos 15 años con sus audífonos puestos y con una cara de que todo le da asco, si el típico adolescente rebelde, pero no era feo al contrario era muy lindo, su piel blanca que resaltaba con la hora dorada de la tarde, unos labios rosados y gruesos pero no tanto y un cabello castaño claro un poco largo partido por la mitad y colocando un mechón atrás de su oreja... oh por dios se miraba tan lindo... de pronto el volteo a mirar a mi dirección y como por instintos me agache, no podía ser más tonta ahora como le iba a dar la cara ya me daba vergüenza porque obviamente había visto como lo observaba y luego me escondía pero lo peor de todo era que mi mamá me obligaría a que la acompañara a saludarlos y llevarles galletas ya podía imaginarla haciéndolas.
Me fui a mi habitación y me cambie de ropa me puse una sudadera porque ya empezaba hacer mucho frio y un jean, llego mi mamá y la escuche llamarme
- Orión baja rápido
- mamá porque tanto alboroto
- llegaron vecinos nuevos así que me voy a poner hacer unas galletas y ahorita me acompañas a llevarlas ok
- ok, mamá
Ya sabía que esto iba a pasar y rogaba por que el chico no estuviera presente, al parecer era de esos que mantienen todo el día encerrados en su habitación escuchando canciones depresivas.
Llegamos al frente de su casa y mi mama toco el timbre con la mano que tenía libre porque con la otra sostenía el canasto con las galletas, salió la señora de la casa con una sonrisa de oreja a oreja se saludó con mi mama que al parecer ya se habían conocido, mi mamá me presento
- ella es mi hija Orión
- mucho gusto Orión soy Patricia- decía mientras me estrechaba la mano-
- el gusto es mío- conteste
La señora Patricia nos invitó a pasar al interior de la casa, era muy bonita y acogedora el perro apareció dándome lametazos en las manos y yo inocente acaricie su cabeza y después no podía quitármelo de encima, nos sentamos en unos sillones que no habían sido terminados de desempacar, la chimenea estaba encendida y nos dieron chocolate caliente todo era perfecto hasta que a la señora Patricia se le dio por decir algo que me dejo helada.
- les quiero presentar a mis hijos, es que desde mañana empezamos a trabajar con mi esposo en el hospital y ellos van a estar solos así que es bueno que los conozcan para que me avisen si están en problemas- hablaba con una pequeña sonrisa tímida-
Ah ya veo así que ellos eran los nuevos médicos de los que había escuchado hablar, pero bueno Orión no tienes por qué preocuparte es normal que uno quiera saber quiénes son tus vecinos además porque me voy a poner nerviosa por un niñato, me puse derecha con postura dominante y espere el golpe con mucha seriedad y dignidad
- Robbin y Esteban vengan a saludar a las vecinas
El niño menor bajo corriendo por las escaleras y nos dio un abrazo a cada una el cual correspondí un poco seca mi mamá, por el contrario, le devolvió el abrazo con mucha calidez se notaba que siempre había querido tener otro bebe, pero por problemas de salud nunca pudo.
- y Robbin- le pregunto Patricia al niño
- No quiere bajar
- este niño, espérenme un momento voy a traerlo
Subió rápidamente las escaleras y después de unos minutos bajo con el chico atrás de ella, el venia con la mirada baja y podía ver sus espesas pestañas, traía los labios un tanto resecos, pero aun así muy rojos me imagino que este niño debe de traer a muchas niñas babeando atrás de el
- él es mi hijo Robbin, tiene 15 años y espero que se porte muy bien como vecino
Lo sabía había acertado en su edad, El ser acerco hasta donde estábamos y le dio la mano a mi mamá y saludo con una sonrisa tan falsa; después se dirigió hasta donde yo estaba y me estiro su mano mirándome a los ojos los cuales yo tampoco podía dejar de ver, me levante y éramos casi de la misma estatura yo media 1'68 y el debería de medir 1'70 bastante alto para su edad, tome su mano pero este saludo solo duro como dos segundos porque el quito su mano enseguida y subió nuevamente a su habitación, ¿acaso yo también le daba asco?
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UN AMOR PROHIBIDO
Teen FictionTodos los romances suenan mas interesantes cuando una chica se enamora de un hombre mayor, pero que pasara si es al contrario hay si la sociedad lo mirara como algo asqueroso... acaso las mujeres no podemos también ser interesantes conforme nos volv...