Blood

"Herida"

- En esta condena que muchos llaman vida...para mi eres lo único que importa...te amo...tanto...que el día en que ya no existas también dejare de existir...

- No puedes...debes seguir viviendo...debes esperar por mi...yo regresare a ti...

- ¡Por favor!...no...no me dejes...no te vayas... ¡NOOOOO!

Xiao Zhan despertó agitado, todo su cuerpo temblaba, su corazón quería salir de su pecho, con asombro llevo sus manos a su rostro y estaba empapado de lágrimas, en su pecho una fuerte opresión le impedía respirar, sentía dolor, tristeza, angustia, sentía que algo le faltaba, que había fallado en algo, tal vez una promesa, llevo sus manos a su rostro y empezó a llorar, no sabía la razón, tampoco entendía, aun así lloro.

Después de media hora el llanto ceso, aquellas extrañas emociones se habían ido y solo le quedaba una gran confusión, aquel sueño había regresado a él después de tanto tiempo, lo más curioso de sus sueños es que en ellos nunca lograba captar los rostros de las personas, solo podía percibir sus voces débilmente solo el dolor de aquel momento era lo único que podía sentir.

- ¡Buenos días!- Yibo estaba sentado en la mesa del comedor con un periódico en más.

- ¡Buenos días!.- Xiao Zhan arrastraba sus pies a la mesa.

- ¿No dormiste bien?.- Yibo lo miro con preocupación.

- ¿Tanto se me nota?.- Xiao Zhan lo miro con curiosidad.- Por cierto...¿Cómo regresamos?

- Te quedaste dormido...yo te traje.

- ¡Ah!.- Xiao Zhan sonrió avergonzado.- Lo siento por eso.

- ¡Buenos días señor Xiao!.- Ji Li se detuvo a su lado.

- ¡Buenos días!...- Xiao Zhan masajeo su entrecejo.- En serio...¿Vas a continuar llamándome señor?

- Es que...- Ji Li sonrió avergonzad.- Siento que si lo llamo por su nombre sería un irrespeto.

- En todo caso...esa etiqueta debería de usarla yo...

- ¿Perdón?- Ji Li lo miro confundido.

- Si hablamos de respeto...yo debería de llamarte señor...eres muchos más mayor que yo...por siglos.

Yibo levanto con suavidad el periódico para cubrir la sonrisa que se le escapó al escuchar las palabras de Zhan, recordó su pasado y sonrió con más intensidad, sin duda esa persona no había cambiado, seguía siendo igual de osado, impulsivo, intrépido y seguía diciendo las cosas sin tapujos, la única diferencia era que no reconocía al hombre frente a él ni sus sentimientos.

- Señor...el auto ya está listo.

- ¡Bien!- Yibo se levantó, luego miro a Zhan.- Quedas en tu casa, más tardes seguiremos con la historia.

- ¿A dónde vas?.- Xiao Zhan tomo su mano y lo miro con preocupación.

- Debo visitar el museo nacional...tengo que verificar que el lote haya llegado a salvo...- Yibo apretó suevamente la mano de Zhan y le sonrió.- Siéntete cómodo, lo que necesites...pídelo sin problemas.

Yibo se fue desprendiendo con suavidad de la mano de Zhan quien no quería dejarlo ir, una vez que Yibo desapareció por la puerta Xiao Zhan se quedó pensativo y algo sorprendido ¿Por qué había actuado de esa manera? No tenía una explicación a aquello, solo sabía que en ese momento sentía que no quería que Yibo se alejara de el, sintió miedo, como si una vez que se fuera de su lado no lo volvería a ver, se quedó en aquella mesa pensando una y otra vez sin encontrar respuesta a ello.