🐸

207 11 0
                                    

Su última mirada es hacía konan y Naruto, no dice nada solo se queda callado pensando en sus fracasos, ahora lo entiende no es que la
oja haya sido la causante de su dolor en la vida porque Jiraya también era un ninja de la oja y a pesar de ello velaba por la justicia sin importar quien la recibiera, su dolor como cualquier otra persona siempre estuvo presente pero aquello nunca fue ni un impedimento ni su principal  proposito para cambiar el mundo shinobi, lo hacía simplemente porque tenía la voluntad de ello, este último sentir le hace llegar a su conclusión la unica persona que realmente represento el camino de su maestro fue la misma persona que siempre fue su esperanza, Yahiko, a quien ahora tenía que justarle cuentas.

Abré los ojos lentamente en un mundo extraño azul celeste, puro, eterno que no se evapora ni se consume, el miedo lo tensa a cada poro cuando ve aquella espalda ancha, ese cabello naranja alborotado, como carajo podría si quiera dar una palabra.

- Yahi....- No puede tolerar aquello, su cuerpo duele pero desde el interior, su alma se hace pequeña se siente como el niño que siempre fue

- ¡Idiota!- se voltea el pelinaranja con la peor cara de furia que Nagato jamás había divisado en su amigo, sintió estremeser su alma y quebrarse cuando vio su mirar cabreada sobre su rostro mientras lo tomaba toscamente del cuello, se quedo estatico con las mejillas marcadas de lagrimas - Idiota, idiota, idiota-  repeteía el pelinaranja- lo peor de todo es que no puedo sentirme realmente furioso- susurró para abrazarle fuertemente tomando su cabeza en su hombro

- Yahiko... perdoname- susurró entre lloriqueos, probablemente solo Yahiko lo entendió debido a su experiencia con eso

- Profanaste mi cuerpo convirtiendolo en un simbolo de terror y violencia, reformaste a Amegakure con el miedo y la opresión pero aún más llevaste a konan con tu soledad... y a pesar de ello debo admitir que hiciste más cosas de las que mis ideales hubieran logrado, Amegakure propero, Konan se sintio satisfecha con la venganza y mi cumpli mi sueño de ser un Dios

- Supongo que ya estas al tanto de mis ideas- timidamente con verguenza susurró el pelirrojo

- Sí tú nunca te equivocaste aún si estabas en lo correcto hubiera preferido que vivieras como un idiota toda la vida, pero hey.... Nagato aún no es tarde, vamos a casa

- ¿Por que quedrias aun llevarme contigo?

- Porque te aprecio tanto para querer salvarte, siempre lo hice y siempre lo haré, ven esperemos a konan, Nagato.- dicho esto el pelinaranja corre coml un niño, así es como todo empieza como acaba con el pelirrojo como siempre siguiendo con desesperación la espalda del pelinaranja

- ¡Espera Yahiko!- se escucha su grito entre cortado mientras sigue su silueta pero ahora esperanzado.

One shot● Shipp del trio de AmegakureDonde viven las historias. Descúbrelo ahora