Sadistic.

4.

—¡si! ¡¡si!! ¡gracias! ¡¡si!! ¡gracias! ¡gracias!—

—Ah... Ahora. Ya hemos elegido al ladrón, tenemos que castigarlo, ¿Verdad? Felicidades, viejo. Puedes irte a casa ahora.—

—Ahh... ¿En serio?—

—¡Por supuesto!—tocó su nariz— Siempre y cuando te deshagas del ladrón, quiero decir.—

—¿Deshacerse...? ¿Quieres que lo mate?—el hombre se ponía cada vez más nervioso— ¡De ninguna manera! ¡No hay manera de que pudiera...! Matar a una persona... ¡No hay manera de que pueda cometer un crímen!—

—¿Crímen?—preguntó Jimin, tomando un cuchillo y apretando las mejillas del hombre— Dame un respiro. ¿Sabes qué es el verdadero crímen? El verdadero crímen es cómo usas ese truco de mierda con las tarjetas para convencer a los jóvenes a que te den por el culo. No se porqué encuentras esto tan difícil. Míralo. —apuntó a Jungkook— Parece un animal salvaje. Dudo que te sientas mal si lo pateas. Mira, mira lo lamentable que se ve...—

—A-ayúdame... N-no puedo hacerlo solo... Ayúdame...—

Le dió un pequeño beso en la mejilla.

—De acuerdo.—comenzó a atar a Jeon con cinta adhesiva— Estarás bien...—le dijo—

Cortó la cinta que cubría las manos del señor, dándole un cuchillo.

—Te voy a guiar, sólo aférrate al cuchillo. Mantenlo ligeramente, como si estuvieras sosteniendo tu propio pene... Eso es...—las manos del hombre comenzaron a temblar— ¿Qué está mal? ¿No estás feliz de irte a casa? ¡Ahora! Para de actuar como un niño... Y enfrenta tu objetivo! ¡Vas a necesitar hacer plaf! ¡Plaf! Y apuñalarlo.—

—No puedo... Lo siento... No puedo...—

—Supongo que este lugar está lleno de bebés.—quitó los lentes al señor, colocándoselos— Bueno, solo tienes que vendarte los ojos entonces.—con una banda tapó sus ojos— ¿Mejor?—observó al hombre que empezó a sudar— Wow, mira ese sudor. Apóyate contra la pared, podrías perder el control. Pásame el cuchillo, y limpiate el sudor. Y aquí tu... Bueno. Lo aseguraré con la cinta. —le ató las manos impidiendo su movilidad— Bien. Ahora cuenta lentamente hasta 10. Tú sólo sostén el cuchillo... Y ese chico simplemente caminará hasta introducirselo. ¿No me digas que nisiquiera puedes hacer eso?—lo miró— Si, no hay forma de que no puedas hacer eso. Eres el que podría terminar muriendo. No tienes tiempo para preocuparte por él... Estos son tiempos desesperados, después de todo.—tomó a Jungkook por detrás—

—Ugh... Jimin... ¡No! ¡No quiero morir! ¡Odio los cuchillos! ¡¡Estoy asustado!!—

—Empieza a contar.—

—¡¡Estoy asustado!! ¡No! ¡¡No!!—

—Diez... Nueve...—

—¡¡Jimin!!—