Es un acervo compilatorio de reseñas favorables respecto al siguiente tipo de contenido:
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-Videojuegos (sin importar su fecha de lanzamiento).
Pero ate...
Cuando mi esposa me preguntó «¿La vemos?», y vi el titulo, respondí «¿Otra película ñoña?»; pero luego me fijé que eran "Kylo Ren" y "Viuda Negra"los protagonistas, y exclamé «¡Oh sí, debe estar buena!».
Marriage Story (o Historia de un Matrimonio) es una cinta dramática escrita y dirigida por Noah Baumbach, y es protagonizada por Scarlett Johansson y Adam Driver.
La historia nos presenta a Charlie Barber (Driver), un exitoso director de teatro radicado en la ciudad de Nueva York; y a Nicole (Johansson), su esposa, cómplice y actriz principal en sus producciones. Un matrimonio donde el arte y el talento funciona como piedra angular del mismo. Compañeros y socios tanto en escena como en el hogar, con tales elementos, ¿qué podría salir mal?
¿De qué va?
En principio la historia nos presenta la clásica escena "cliché" de este tipo de filmes: momentos amenos narrados por alguno de los involucrados donde se expresan las cualidades y virtudes del conyugue en cuestión; aunado a ello, una paleta de colores pastel acompasados por una iluminación de corte primaveral nos envuelve en una melosa y nostálgica estampa que a más de una haría suspirar; no obstante, todo ello queda descartado al momento de darnos cuenta que toda la ñoña descripción forma parte de una sesión de terapia matrimonial, porque sí, los protagonistas de la cinta ya no viven un "cuento color de rosa".
Los eventos suceden a un buen ritmo y nos dejan profundizar en la personalidad de cada uno de los protagonistas; Charlie, por un lado, es un apasionado del arte. Literalmente vive para el teatro y no hay nada más importante para él que su compañía teatral; Nicole, por su parte, a pesar de gozar del título de "primera actriz" en la agrupación que dirige su esposo, no siente tener el protagonismo que ella esperaba, ya que, antes de conocer a su actual pareja, ella gozó de fama propia al ser actriz de televisión.
Los problemas comienzan a magnificarse a partir de que Nicole recibe la oportunidad de estelarizar una serie televisiva al otro lado del país (Los Ángeles), justo en el momento en que la compañía teatral comenzaba a dar un buen salto de importancia al ganar un prestigioso premio de la categoría. Esta situación la coloca en una posición incómoda puesto que implicaría que ella desistiera de realizar sus sueños por perseguir los de su pareja, situación que ya había ocurrido con anterioridad sin conseguir una verdadera valoración por parte de su conyugue.
¿Qué tiene de novedosa esta cinta? ¿De qué méritos goza para haber sido nominada al Oscar?
En principio de cuentas diré que: la ambivalencia.
¿A qué me refiero con este término? Al hecho de que en realidad no podríamos considerar que existe un "Héroe" y un "Villano" tal cuál en la trama, ya que el argumento está tan bien planificado que nos permite ser totalmente subjetivos al momento de elegir. Si bien Nicole adopta por momentos una postura de "P*rra empoderada"; en algunas partes, también es menester recalcar que Charlie no es ninguna "blanca palomita"; lo que sí es sumamente estresante es el "como" se dieron las cosas entre ellos.
Y aquí, en este punto, es donde hace su aparición: el argumento.
Lo genial de este guión es lo "brutalmente honesto" que puede llegar a ser. Para quienes estamos casados, hemos estado, o para aquellos que han podido ver de cerca los "sinsabores" del matrimonio (ya sea en el propio hogar con sus padres, o con alguna amistad cercana), no me dejarán mentir cuando digo que este filme brinda situaciones que con suma facilidad podemos empatizar con ellas.
La trama es simple, pero a la vez profunda. Es dura, es cruda y es, como se suele decir: "Lo que hay".
El "... Y vivieron felices para siempre", queda masacrado de tajo. Esta producción te hará tomar partido por alguno de los "bandos" —por decirlo de alguna manera—. Te va a estresar, y en ciertas escenas vas a odiar lo que estás viendo en pantalla, quizá por ello es tan magnifica; y así, llego al punto final de mi apreciación: la actuación.
¿Qué nos aporta histriónicamente hablando?
Un vaivén de emociones. Una montaña rusa de matices. Una profundidad que duele en el alma en ciertas escenas muy puntuales.
Normalmente me considero un tipo reacio a mostrar emociones, aunque claro, en las escenas dolorosas y de suma tristeza siempre se me escapa una que otra lágrima, todo bien, soy humano, ¿no?; pero aquí, particularmente en la toma donde Nicole y Charlie discuten en el apartamento del segundo, el diálogo comienza a avivarse y la discusión se eleva en intensidad, al grado tal, que logró sacarme más de una lágrima, ¡pero de rabia! ¡Así de intensa es!
Sin duda, es una de las mejores interpretaciones de Scarlett. Te hará quererla, odiarla y demás emociones encontradas que puedan surgir. Pero al final... o al menos así fue para mí, podrías lograr comprender las razones por las que su personaje actuó de la manera en que lo hizo.
No te la pierdas. Está en Netflix. Y, aunque no ganó ciertos premios a los que estuvo nominada, no deja de ser una joya que no debes dejar pasar.
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Yo soy Cathal Ryter, y me despido, no sin antes desearte un buen día, una mejor semana y brindarte: Un pulso, un abrazo y un sentir.
