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Fiesta (2)

Llegaron a dicha fiesta, mientras que la música retumbaba en todo el lugar, haciendo que doliera sus oídos al principio. Hoseok, Jin y Namjoon esperaron en la barra de alcohol a los que faltaban, mirando hacia la entrada esperando que estos llegaran de una vez. Después de unos minutos, Yoongi, Jimin, Taehyung y Jungkook entraron por aquel lugar, mirando hacia todos lados en busca de los tres faltantes.

Hoseok entrecerró sus ojos al ver cómo Jimin venía pegado a Yoongi. La verdad es que este era amigo suyo, pero sospechaba de los sentimientos hacia el pelinegro y no le gustaba las actitudes que estaba tomando. Decidió ignorar todo tipos de pensamientos y dedicó una de sus mayores sonrisas cuándo esos cuatro chicos se dieron cuenta de su presencia a lo lejos.

—Ahí están. — Dijo Jin, mientras alzaba una de sus manos diciéndole que vinieran caminando rápidamente hacia acá.

Se saludaron entre todos, mientras que las miradas de Hoseok y Yoongi no pasaban desapercibidas. Tirándose coqueteos con ellas, sonrisas sonrojadas y uno que otro leve roce con sus manos, tratando de tocarse en cualquier momento sin ser vistos. No sabían porque lo ocultaban, tal vez era la vergüenza o es que aún no confirmaban nada del todo.

Después de un par de cervezas, pisco y vodka, decidieron ir a bailar todos juntos al medio de la pista, saltando y riendo mediante la música se hacía más fuerte y movida. Estaban pasados de copa, se había emborrachado muy rápido y no estaba en su cinco sentidos.

Jimin decidió que era tiempo de atacar, de provocar y cómo no estaba consciente del todo, decidió tomar aquella idea y empezar a bailarle a Yoongi, quién totalmente confundido no rechazó aquel acto y decidió seguir bailando y disfrutando. Por una parte, Hoseok observaba todo, sin saber qué hacer o decir, no sabía si estaba bien interrumpir cuándo él y yoongi no tenían las ideas claras, no sabían si se gustaban o si iban a empezar una relación. 

Todos no sabían cómo reaccionar, estaban paralizados y totalmente idos cuándo vieron cómo Jimin se tiraba a los brazos de Yoongi, uniendo sus labios en un beso que, no fue seguido, pero tampoco rechazado, durando más segundos de lo que esperaban y viendo cómo Jimin disfrutaba de todo esto.

Hoseok escapó de ahí, tomando sus cosas y saliendo por la puerta principal. No aguantaba seguir viendo, no aguantaba seguir ahí viendo la realidad. Él y Yoongi no son nada, no son absolutamente nada y al fin se daba cuenta que él simplemente se estaba armando una película en su cabeza. Sabía que no era culpa de Yoongi, tampoco de Jimin, pero su corazón estaba tan dolido que sólo tomó aquel taxi y se dirigió a casa.

Por otro lado, Jin separó brutalmente a Jimin de Yoongi, mandando a Jungkook que fuera detrás de Hoseok. El efecto del alcohol se había ido completamente de sus cuerpos cuándo vieron aquella escena, sin poder creerlo.

—¡Jimin que crees qué haces! — Gritó Jin, mientras lo miraba con una cara totalmente decepcionante. — ¿Sabes lo que hiciste? ¿sabes lo que acabas de hacer?— preguntó, mientras Jimin se daba cuenta de él tremendo espectáculo que había formado y él como decepcionó a su amigo.

—Y-yo...

Yoongi por un lado, no sabía cómo reaccionar, así que rápidamente corrió hacía la entrada para ir detrás de Hoseok, pero una mano fuerte golpeó su pecho deteniendo su acción.

—Hey, espera. ¿Quieres ir detrás de Hoseok después de todo esto? él debe estar muy mal y tal vez quiere un rato a solas.— Habló fuertemente Namjoon, tratando de tranquilizar a Yoongi.— Jungkook me dijo que se había ido a casa, así que debe estar todo bien.

—¿Jungkook? ¿y por qué mierda sabe Jungkook? me vale un carajo que se haya ido a casa, Namjoon. — Quitó la mano de su pecho con brusquedad.— Tengo que hablar con él y tú no me lo vas a impedir. —Dicho esto, corrió rápidamente tomando el primer taxi que encontró, dando la dirección de Hoseok y pidiendo por favor que fuera rápido.

Hoseok ya había llegado hace algunos minutos a su casa, prendiendo las luces y sentándose en el sillón, sintiéndose vacío y mirando en un punto fijo, pasando por su cabeza la viva imagen de Jimin besándose con Yoongi. Tiró su cabeza hacia atrás, sin saber cuántos minutos habían pasado, hasta que sonó su puerta con unos fuertísimos golpes.

—Por algo está el timbre...—Susurró, levantándose lentamente, preguntándose quién carajos podría ser a esta hora. — Hay timbre, maldito idiot...— Sintió como unas fuertes manos tomaron sus mejillas y unos labios totalmente suaves contra los suyos. Era Yoongi. Yoongi había llegado, besando los labios de Hoseok, quién respondió totalmente gustoso.

— Hoseok, me gustas. Me gustas muchísimo y sabes perfectamente que eso es verdad. No quiero que por esto desconfíes de mí, que no sepas cuánto te quiero y cuan loco me traes. — Dijo una vez se habían separado, viendo cómo los ojitos de Hoseok se iluminaban y brillaban.

—Yoongi, también me gustas.

Sonrieron totalmente satisfechos, besándose una y otra vez, permaneciendo toda la noche juntos.