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Christopher:

Desde que me casé, mi vida se ha vuelto un fastidio porque me limita a muchas cosas.

De repente, llego a casa y veo a mi esposa abrazando a un hombre que está de pie en la puerta.

— ¿Que haces Layla?

Inmediatamente después que escuchó mi voz se apartó del hombre. Esta persona se dio la vuelta para quedar cara a cara.

— Mucho gusto, soy Martín.

La pensé dos veces antes de darle la mano, prefiero quedar como un mal educado que ser amable con el.

El joven me quedó viendo, y al no ver respuesta de mi parte bajó la mano.

— Mejor vete Martín, no quiero problemas. — dijo seria.

El chico asintió y se fue.

Yo entré y ella me siguió.

— Christopher, dejame explicar lo que viste. — exclamó

Me detuve en la cocina tirando el traje a la silla que estaba próxima a la isla.

— No necesito tus explicaciones Layla, no me interesa. — respondí frío

Ella bufó molesta.

— Pero yo te quiero explicar lo que está pasando. — refutó

— MIRA LAYLA, NO ME INTERESA. — dije alterado. — Dejame en paz por favor.

— Pero Christopher...

— Pero nada Layla, vete por favor. — dije molesto.

Ella se rindió y se fue.

La verdad no quería esto para mí, odio que esto me esté pasando, solo vine a almorzar y me encuentro con la sorpresa de que Layla está abrazando a alguien.

¿Saben que..? Me da lo mismo.

Comí en la cocina, después que terminé de comer deje el plato en el fregadero para lavarlo cuando venga. Me acomodé el traje y salí de la casa.

Mientras salía de la casa, mamá llamó a mi teléfono.

— Hola, mamá.

—Christopher estoy preocupada por ti. — exclamó

—Mamá, estoy bien. No tienes que preocuparte por mi vida ya frustrada.

Escuché a la abuela detrás de la línea telefónica.

— A ver, niño malcriado. — dijo la abuela. — Tu esposa no tiene culpa de lo que pasó hace tanto tiempo con la chica Salvatierra.

— Abuela...

— Dejame terminar. — interrumpió

Conecté mis audífonos a mi teléfono y encendí el auto.

— Ya pasaron 4 años Christopher. Tienes un hijo, que pronto verá que sus papas no son felices, y el se sentirá culpable de todo. ¿Tu quieres eso?

Bufé.

— Abuela, prácticamente me sentí obligado a casarme con Layla. Yo no la quiero, además estoy planeando como divorciarme de ella.

Mi mamá y mi abuela se quedaron calladas con esa decisión que acabo de tomar.

— Christopher, llevan un mes de casados y tienen un hijo. Piensa en Alexis, el no se merece eso.

Rodé los ojos.

— Es por Alexis que lo hago, además no quiero que esté escuchando discusiones diario.

— Si es lo que decidiste, no podemos hacer nada. Es cosa tuya. — dijo mamá — Me voy, es de noche acá e iré a descansar. — se despidió y colgó.

¿Divorcio? En serio.

¿Divorcio? En serio

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La Vida Después De Ella [3]® [TRILOGÍA] [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora