¡Odio las bodas! - Ace Attorney || One Shot || Narumitsu.

¡Odio las bodas!

— Wright, ¿Me puedes recordar por qué me has invitado a esta boda?

— Eras mi única opción para no quedarme solo, si hubiera invitado a Maya como acompañante, ahora mismo estaría aquí sentado con una montaña de hamburguesas en la cara... 

— Hm. ¿Aún sigue en el buffet libre?

— Ahí sigue sí... Menos mal que no pago yo...

Wright se puso una mano en la frente y soltó un suspiro de alivio. Estábamos sentados en las mesas más alejadas de la pista de baile, donde estaba todo el mundo. Teníamos una botella de champán medio llena en el centro de la mesa y cada uno de nosotros sujetaba una copa alargada.

—... Me pregunto dónde acabará toda la comida que engulle... — Dije pensando en voz alta.

— ¿No es obvio? Tiene un agujero negro por estómago... —  Añadió el abogado con una sonrisa alicaída.

— Je. Seguro que si le dieras un cardo se lo comería sin pensarlo... —  Continué.

— Edgeworth, los cardos son comestibles. — Contestó dándose aires de superioridad y apoyando sus puños cerrados en la cadera.

— Ja, habló aquí, el que solo conoce tres tipos de plantas.— Solté con intención de bajarle los humos.

— Eh, para tu información, ¡conozco muchas más!

— Entonces, demuéstralo... ¿Cómo se llaman las flores de la mesa de al lado, Sr. Phoenix Wright, Dr. en Herbología?

— P-pues a ver, son blancas así que... S-son... ¡margaritas! ¡Sí, eso! ¡Margaritas! — Afirmó intentando autoconvencerse.

— Ja, ja, ja. Son lirios, Wright. Las margaritas tienen pétalos mucho más pequeños y su corola es amarillenta.

— Estaba poniéndote a prueba, ¿Quién confundiría las margaritas con... los... "libos"? — Continuó con su farsa a pesar de que era obvio su desconocimiento.

— Lirios, Wright.

— Eso he dicho.

Durante unos segundos se hizo el silencio, aproveché para beber de mi copa de champán. Wright simplemente apoyó su cabeza en la mesa dejando ver una expresión de completo aburrimiento en su cara. Observaba a la gente de la pista de baile hacer el ridículo con música de fondo. Todos se reían unos con otros, hacían el estúpido una y otra vez pero no parecían darse cuenta de que realmente no se reían con ellos, sino de ellos.

Wright los miraba ansioso, en su rostro estaba escrito "¡Quiero bailar!". No obstante, sabía que intentaría persuadirme para salir a bailar con él.

— No. —  Solté antes de que lo propusiera.

— ¿Qué? ¡Oh venga, Edgeworth! ¡Si aún no he dicho nada!

— Sé perfectamente lo que me vas a preguntar. No voy a ir a bailar, ve tu solo, no necesitas que vaya yo.

— Te he invitado para que seas mi acompañante, no para que te quedes ahí sentado bebiéndote esa copa de champán sin gas. — Se quejó refunfuñando.

— Mala elección de acompañante entonces. No pienso ir a bailar.

— ¡Pero si bailas bien! ¡Siempre me ganas cuando jugamos al Just Dance!

— No es muy difícil ganar a alguien con dos pies izquierdos. ¿Recuerdas cuándo, por navidades, le regalamos la edición de 2020 a Trucy?

— ¡Claro que me acuerdo! Me diste una paliza...