El hijo perdido de doña Lucha

Luchador

Chino estaba terminando su reporte de la entrevista de ayer y la investigación de los casos que había publicado el doctor Watson en estos ultimos dias en su blog. Estaba por terminar de corregir el ensayo cuando su madre le pone un vaso de medio litro aun lado de él.

--Chino tomate tu licuado de papá Antonio--ordenó doña Lucha

--pero ama...--se quejo el Chino

--tomatelo, te puse doble huevo y nopal con todo y espinas-- le señaló el vaso de la licuadora--te va ser bien, vas a ser como...

--¿como el detective psicoanalista y sociopata Sherlock?--pregunto ilusionado el Chino

--no como tu hermano el Albertano, te vas a poner como el, bien guapo, alto, rubio, limpio de la cara e independiente--dijo Doña Lucha

--agh... que asco, tengo que irme, debo imprimir mi reporte

--¿y porque no usas la impresora que te compre?

--Albertano se gasto el cartucho amarillo imprimiendo sus escudos del América y fotos de Maria

--pero tu hermano no tiene fotos de esa Maria, ha de ver sido tu hermana la Rosa, me dijo que los precios de los jamones han subido y le ha tocado imprimir los precios

--como sea--se encogió de hombros y tomo su mochila--me voy tengo que imprimir este ensayo--salio de la casa

--¡TU LICUADO CHINO! ¡TOMATE TU LICUADO!--le grito Doña Lucha desde la ventana

Después de que se fue Chino, bajo Albertano con su toalla del América, su shampoo Savile con keratina, luego fue Rosa, quien se estaba arreglando para irse a promocionar los jamones y embutidos en la cremeria donde trabajaba.

--jefa, ¿me prende el baño?--pregunto el Albertano

--pídele a tu hermana la Rosa--respondió Doña Lucha

--se me hace tarde, Luchita, tengo que promocionar el nuevo jamón de pierna de pollo--dijo Rosa mientras se comia dos tamales de mole

--y a mi se me hace tarde para ir a ver a Maria--dijo el Albertano

--tu ya eres completamente independiente ¿no?, mejor ve tú a prender el baño--dijo un poco molesta, apuñalando al pobre tamal con su cuchara

--soy un hombre completamente independiente, que todavía necesito que me prendan el baño, hagan mi comida, laven y planchen mi ropa--declaro Albertano

Rosa salio de casa para ir a su trabajo, pero en el camino se encontró a Maria de todos los Angeles, estaba hablando con el Macaco. En la ventana de un carro, se arreglo un poco el brasier, junto al vestido y trato de darle un poco más de volumen a su cabello levantandolo hacia arriba.

--solo dices Hola a Maria--se dijo a si misma

En la ventana trasera, un niño se le quedo viendo, ella lo miro y sintió sus mejillas arder.

--tu no has visto nada--movió sus manos de manera estúpida y le metio un putazo, dejando noqueado al niño

Camino hacia donde estaba Maria hablando con el Macaco, levantó el mentón y se irguio como guajolota buscando pareja, pasando a un lado de ellos.

Mientras tanto con el Chino....

Apenas eran las tres de la tarde y su día iba de la peor manera, la papelería escolar antes de entregar su ensayo sobre el famoso detective, sociopata y psicoanalista estaba completamente llena y entro tarde, la segunda clase olvido su cartulina de la exposición, la tercer clase (en la que ahora esta) al maestro le dio una sobredosis de marihuana por comerse dos brownies que le dio uno de sus compañeros y no encuentran al culpable.