El agua caía en mi cuello, terminaba de enjuagarme mientras tarareaba una canción.
- Mi pequeña cantante, ya se hace tarde, sal de tu concierto y vete a la escuela. -
Reí antes de negar y me apresure a terminar mi baño y me dirigí a mi habitación para vestirme.
20 minutos... Eso tenía para llegar a la escuela, contando los 15 minutos que hacía en auto, apenas llegaría al salón.
Después de 17 minutos llegue a la escuela, me despedí de mi madre y corrí, literalmente, corrí al aula. Por suerte, sólo estaban mis demás compañeros, aún quedaba minuto y medio para que dieran las 8:00 AM.
-¡Dianna!- justo había dejado mi bolso caer en mi habitual silla por las últimas tres semanas y media, cuando escuche la voz de una chica gritar mi nombre. Sonreí al girar y ver a Sara caminar hacia mi. Había dejado suelto su largo cabello rubio y se había maquillado muy levemente, casi nada, pero eso hacia notar más los ojos verdes que tenía. Justo como todos decían, eran muy distintas físicamente y ni por la mente te pasaba que fuéramos primas. Ella es alta, tiene el cabello Rubio y largo, sus ojos son verdes y tiene un cuerpo espectacular para ser sincera, bueno, yo apenas alcanzo el metro con 54 centímetros, mi cabello es castaño y no tan largo como el de ella, y mis ojos son completamente cafés. No me menospreciare pues se que tengo lo mío, pero digamos que somos... Bonitas de distinta manera.
-¡Sara, hola!- la salude sonriendo al momento en que besaba su mejilla- Por poco no llego, se me hizo tarde arreglándome.
-Yo me quede dormida, pero por suerte si llegamos esta vez - reímos levemente las dos antes de que la profesora entrara al aula, directamente a su asiento y comenzara a pasar asistencia. Todo el salón estaba callado, pues con los primeros tres días tuvimos para darnos cuenta de como sería su clase. Ella siempre llega a las 8 en punto y nadie más puede pasar después de ella, aunque sean 8:01 y eso justo nos paso a Sara y a mi los primeros dos días.
El día paso muy lento, contaba los minutos para poder llegar a mi casa y acostarme, aunque en realidad debía hacer mucha tarea.
Cuando por fin vi el auto de mamá sonreí y camine hacia la otra calle, no vi a un chico que llevaba mucha prisa así que no pude esquivar el golpe que dio mi hombro con su brazo.
-Disculpa -dije viendo al castaño, el cual sólo, siguió su camino sin siquiera voltear a verme. Yo fruncí el ceño y me encogí de hombros yendo al auto de mamá. Aunque mi hombro me dolía un poco, estaba feliz por llegar pronto a casa.
Justo al entrar a mi casa mi móvil comenzó a sonar. La canción de "Sweet Child o'mine" de Guns and roses sonaba mientras buscaba mi teléfono en mi bolso.
-Hola- conteste en cuanto tuve mi teléfono.
-Nany- era la voz de Abraham - ¿Como estas? Hoy no te vi en la escuela.
Abraham y yo salimos hace unos 8 meses pero no funciono, y de hecho sólo hace aproximadamente 2 meses comenzamos a hablar de nuevo.
- Si, estuve demasiado ocupada, lo siento. No se por que pero todos se pusieron muy facheros hoy y no tuve otra más que entrar a todas mis clases. -
-Oh, si no hay problema... Pues bienvenida a la preparatoria. - Ambos reímos levemente antes de que el continuara hablando - Sólo quería preguntarse si más tarde quisieras ir a comer? ... Si tienes mucha tarea esta bien, lo entiendo-
- Emm... Yo creo que - Mire mi carpeta y vi que no faltaba mucho para terminar y la demás tarea podría hacerla en menos de una hora o eso esperaba yo, la verdad estaba muy estresada como para quedarme en casa haciendo tarea- ¿Puedes pasar a las 7:30 por mi? -
-Claro que si. Nos vemos más tarde, te quiero - Dijo y corto la llamada. Yo tenía una sonrisa en el rostro pero se borró al momento en que tome la pluma y comencé a hacer mis proyectos.
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Love is all you need
Teen Fiction-Demonios- me repetía una y otra vez mientras cargaba todo en las manos Tenía mi bolso colgado de mi hombro izquierdo, una carpeta llena de trabajos y letras de canciones que debía aprenderme entre mi brazo y mi costado, además de la libreta con las...
