II

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JK 


...

   No-te-amo. No-existís-en-mi-futuro. Mi-futuro-sí-existe-pero-no-es-con-vos. La vida. Esa cosa revoltosa que te deja de cara un martes a las siete de la tarde.

   No sé cuántas horas me quedé mirando la pared, esperando que él volviera. Cuando TaeHyung cruzó la puerta, el tiempo se desfiguró. Él se fue...

y todo... se... volvió... más... len to.

   Hizo que todos los días fueran el mismo día.

Todos... los... días... el... mismo.

   No-te-amo. Yo tampoco me amo ahora, TaeHyung. ¿Me puedo querer sin que me quieras? ¿El amor es algo que viene de afuera o de adentro?

   Seguí yendo a trabajar, seguí yendo a los partidos de fútbol de los miércoles, seguí llamando a mi vieja todos los días a las ocho de la noche, seguí comiendo como un orangután. Seguí porque de eso se trata siempre, de seguir. Al mundo no le importa cómo te sentís, le importa que cumplas-tus-obligaciones.

Todos... los... días... el... mismo.

   Empezaste a venir por tus cosas cuando yo no estaba. Lo primero que te llevaste fueron los CD. El de Spinetta era mío... pero no te llamé para reclamártelo. ¿Cómo se le pide un CD a un hombre sin decirle "volvé, te necesito"? Yo no sé. Por eso, elegí no pedirte. Después, fueron las sábanas (¿por qué las necesitabas tan urgente?). El velador de tu lado de la cama (lo odiaba, hiciste bien). Te llevaste los cuadros, las macetas del balcón, tus libros, el espejo del cuarto, lo que te quedaba de ropa y cuatro años de relación.

   Moría de ganas de verte. Pero, ¿para qué te iba a buscar? Amar a alguien también es no seguir lastimándolo cuando ya no lo podés hacer feliz. Y yo no te hacía feliz, y vos ya-no-me-amabas.

El tiempo... empezó a ir... unpocomásrápido.

   Dejé de comer como un orangután y adelgacé cinco kilos, me puse de novio con Park Jimin (tenías razón, me tenía ganas y yo no me daba por aludido), me recibí de abogado, rescindí el contrato del departamento que compartimos dos míseros meses en Congreso, la abuela Inés resultó ser mortal y me dejó tras su partida, con ochenta y cinco años recién cumplidos, una suma de dinero lo suficientemente importante para comprarme mi propio lugar. Y entonces, en medio de la mudanza a mi nueva vida, la vi. Hecha un bollo, llena de pelusas, abajo del sillón, tu remera favorita. Te la había comprado yo en un recital de los Redondos apenas nos pusimos de novios y la tuviste puesta hasta que se suicidó de uso social para pasar a un mejor destino: ser pijama. Tu remepijama favorito. La agarré, y le sacudí la suciedad del tiempo. La cara del Indio Solari me miró con el ceño fruncido, como prohibiéndome tirarlo al tacho de basura. Tragué saliva y me acerqué al teléfono, Hacía más de diez meses que no escuchaba tu voz. Pero todavía me sabía tu número de memoria.

   -Hola.

   Carraspée. Me temblaban las manos.

¿Corto?

   -¿Hola?

   Apreté la remera con fuerza.

   -Hola, TaeHyung. Te habla JungKook. ¿Tenés un minuto?



















si hay algún modismo que no entienden, pregunten tranquilamente 🌻

C O S A S | kim taehyung x jeon jungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora