04: Xenofobia

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JiMin había arriesgado su outfit a algo más revelador. Había sacado su croptop con el estampado de "Daddy's boy" en medio y un jogger de color negro que abultaba aún más su trasero. Su brillo labial tenía pequeños destellos y su cabello había sido peinado hacia atrás con una partición en el medio pero algunos mechones rebeldes aún caían sobre su frente. 

El contoneo del rubio cegó a todos los estudiantes al cruzar la entrada y su aroma poderoso de frambuesa se coló en los estudiantes más cercanos mientras se abría paso en el mar de gente. Su delgado abdomen era admirado por varias personas y tenía una sonrisa inevitable en el rostro. Triunfante. Estelar. 

Abrió su casillero y pensó en activar algunas emociones en la oficina, encontró la excusa perfecta cuando su madre lo "obligó" a llevar un pedazo de pay a Betty. 

Claro que no iba obligado, sólo fingió molestia pero lo que quería era presentarse en la oficina y tomar algunos suspiros de sus maestros. 

Cuando cruzó el pasillo y llegó encontró a varios maestros hablando, algunos lo miraron unos segundos y otros le clavaron la mirada. Divisó a Hoseok, Yoongi y a Taehyung. Este último saliendo de la sala de maestros. Detrás de él llegó JungKook junto a NamJoon,  escuchando sus voces apagarse cuando vieron la parte descubierta del chico. 

- Gracias, cariño, dile a tu mamá que es una mujer ejemplar - dijo Betty viendo el pedazo de pay que había entregado el rubio.

- No hay de qué, le caes muy bien, a ver qué día vas a nuestra casa a cenar. 

Betty mantuvo una conversación amena con el pequeño mientras Hoseok y los demás escuchaban atentamente, maldijo por querer ser invitado a cenar con JiMin. 

El rubio se carcajeó saltando de más y todos pudieron ver los glúteos de JiMin moverse suavemente, Yoongi mordió su labio. Entonces la profesora Jones se le acercó al jovencito, la maestra Jones era una mujer más de treinta que era bastante estricta con sus alumnos o eso le habían dicho a JiMin. 

- Joven Park, siempre dando de qué hablar - dijo en tono firme y el rubio alzó la mirada. Fue la primera vez que NamJoon tragó saliva por ver las mejillas rosadas y los destellantes labios de JiMin.

- Maestra Jones, ¿cómo está? ¿Se siente mejor? - preguntó Betty y fue totalmente ignorada. 

- Park, ¿sabe el código de vestimenta del colegio? 

El rubio asintió levemente. "Él puede vestirse como malditas quiera" pensó Taehyung. 

- Me parece que no le han informado bien, pues ha venido hoy con estas ropas. -dijo señalando despectivamente su vestimenta. El rubio frunció el ceño enojado.

- Me han informado bien. Que yo no quisiera acatarlo es otra cosa. - dijo enfrentando a la maestra, a JungKook se le cayó la quijada. Ni siquiera él la había enfrentado de esa manera. 

- Jovencito, ¿qué son esas frases? - dijo ofendida la maestra pero enseguida frunció el entrecejo - No pensé que fuese un insolente, ¡y en sus primeros días de escuela! ¡Qué deshonra! 

- Puedo vestirme como yo quiera, ¿quién es usted para decirme algo? 

- Tu autoridad. 

- Yo no sigo las autoridades. 

- Pues tendrá que hacerlo si quiere establecerse aquí, jovencito. 

- ¿Y si no quiero? 

- Su insolencia llega a niveles magníficos, Park.

- Su estupidez llega a niveles magistrales, Lydia. -dijo el rubio dejando el formalismo de lado y todos en ese momento lo miraron expectantes y sorprendidos ante tal descaro. El rubio no mostró ningún miedo ante la amenazante mirada de la maestra, ofendida por supuesto. Se había metido con la forma de ser del pequeño y había estallado porque se le había orillado a hacerlo. 

Buenas NotasWhere stories live. Discover now