05 𝓶𝓪𝓻𝔃𝓸, 2017―el va a estar bien, iri―asiente valentin dándole confort a irene
―no se valen, tengo miedo―murmura apretando el celular en su mano
recién mientras iban para su casa después del quinto, irene había recibido la llamada de su madre diciendo que acababan de ingresar a damian a urgencias por un accidente de moto.
irene aún seguía sintiendo ese nudo en la panza y la presión en el pecho, y es que la sensación que había tenido todo el día la había llevado a esto.
el trayecto del colectivo hasta el hospital parecía ser eterno y los recuerdos inundaban su mente.
pero no los iba a dejar entrar, no hasta que sepa que damian estaba bien. solo iba a mantenerse estable sino damian después se iba a burlar de ella como hacia siempre.
―n-necesito ver al paciente que acaba de entrar a urgencias―esta trata de calmar sus manos que temblaban―d-damian volnovich.
la recepcionista lo busca en la computadora quedándose quieta por unos segundos dejando la incertidumbre en ambos jóvenes.
―s-soy su hermana―susurra esta con un nudo en el estomago
esta con una mirada de pena, le indica donde quedaba la sala.
el ambiente no era para nada agradable, se notaba la tristeza.
―m-mamá?―irene se acerca a ella que estaba tirada en el piso llorando
su corazón da un fuerte latido al ver a su madre llorando, sus ojos se llenan de lagrimas al imaginarse lo peor. aunque no quería pensar en eso la situación no la ayudaba en nada.
―que le pasó? damian está bien?―le pregunta al doctor que estaba ahí
―falleció, irene―responde seco, su padre.
el corazón de irene va latiendo en menor velocidad al escuchar las palabras.
―lo siento mucho―el doctor le da un leve apretón en su hombro de alguna forma u otra tratando de consolarla
―que?―susurra negando, sus ojos dejan escapar pequeñas lagrimas.
no podía ser, era imposible.
no?
―e-es imposible, no puede ser―esta niega separándose de los brazos de valentin―él no me dejaría tiene que ser una confusión, tiene que serlo voy a hablar con la de recepción o con alguien, no puede ser esto...―su cara era tan pálida que parecía las blancas paredes del hospital
―iri...―el de ojos claros trata de evitar que se vaya
―no, valentin. tiene que haber una confusión, él no me dejaría.―niega esta―no a mi, no a su hermanita.
esta se gira para volver a encaminarse a la recepción de la clínica pero el sollozo de valentin hace que esta se detenga.
―se fue irene―la voz ahogada de valentin hace que esta de medía vuelta para mirarlo―damian murió, no está más!
y ahí es cuando irene siente su corazón romperse.