Tan entusiasta ella,
todavía la recuerdan,
era buena y divertida,
o al menos eso cuentan.
Pero todo cambió un dia,
malas noticias llegaron,
es que frente a esa enfermedad
casi nadie podia
y a sus padres arrasaron.
Dicen que su cara cambió,
nadie lo supo explicar,
dentro de ella algo murió
porque sabe que nada va a cambiar.
Por eso ella quiere insitar
a que vivan cada dia,
porque la vida es un regalo
que pocos saben apreciar.
El cáncer no es un castigo
sino una cuestión de azar,
que te mata a pedido
sin que te puedas preparar.
No me puedo callar ante tanto sufrimiento y es que lo llevo por dentro desde que ella partió, pero se que estará mejor porque al final descansó en paz.
Por eso el 15 de febrero hago homenaje a la lucha contra el cáncer infantil, para que todos puedan sentir las tristes historias que se repiten, en la que millones de niños compiten por ver quien llega con vida al final.
La vida y sus pequeños detalles son cosas que no agradecemos, porque deseamos lo que no poseemos y despreciamos lo que ya tenemos.
Para un ciego la vista es lo que desea tener, para un sordo el sentido auditivo, para un niño con cáncer es la esperanza. ¿Y para ti, que es lo importante?
