Tanto que decirte.
Tanto que decirte y tan poco tiempo... Mis aires han cambiado junto a mi forma de ser, dicen algunos que ya no soy el mismo, que me he vuelto más frio buscando tu luz...
Mentiría si dijese que no pasas por mi cabeza algunas noches, debo admitir que anhelo esas noches de pasión en las que nos dejábamos llevar por la luna llena y extaño nuestras sonrrisas y las caricias al vernos despertar cads mañana.
Momentáneamente hiciste creerme ese mundo en las nubes que teníamos los dos. Esas locuras que imaginábamos, nos compenetrábamos a la perfección, decían algunos que eramos la pareja ideal, que realmemte sin ser conscientes nos pasabamos el día en ese viejo desván en el que soliamos estar.
Diría yo que ya no es lo mismo, las corrientes cambian y yo soy consciente de que en algún momento mi viejo barco ya no navegará por tus cálidas costas, mi cazadora ya no estará en ese perchero tan peculiar que tanto te gusta, y este bastado no volverá a gastar ni un solo segundo en ti.
¿Qué nos pasó?...
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Pensamientos de una mente maquiavélica.
Short StoryBreves relatos profundos, estos son frutos de la amistad entre la tinta y mis lágrimas, siempre que estas caen, la tinta se esparrama en el folio como si de consuelo se tratase.