Nota de autor: He decidido comenzar con un relato ya que me gustaría comenzar después con los ships, así que disfruten del contenido.
Había entrado a mí departamento bastante cansado ya que no tuve una jornada bastante fácil que digamos aparte de que tuve muchos retadores para la medalla base. Que día más desastrozo fue hoy.
Había dejado mis cosas en una mesa para saber luego que debía corregir unos exámenes, fui a la cocina para prepararme un ramen instantáneo ya qué al no tener tiempo no podía comer muy saludable aunque quisiera comer por lo menos una empanada.
Prendí la cocina para calentar agua, le hice un agujero a lo solapa dónde estaba el ramen para meter ahí el agua para que se cocine bien los fideos.Cuándo terminé de hacer mi cena me fui a sentar en unas de las sillas tirando por ahí mis zapatos por qué me estaban matando los pies del cansancio.
Era una noche tranquila, "gracias, dios", había pensado, ser profesor no era rosas y diversión dije en voz alta como si estuviera hablando con alguien.
—Cheren estas hablando otra vez tu solo —me dije a mi mismo para seguir comiendo tranquilamente planeando todo lo que tenía qué hacer para mañana.
Para despejar un rato mi mente me levanté de la silla dirigiéndome hacía una ventana para tomar algo de aire, tenía un dolor de cabeza impresionante, miré el cielo oscuro que era acompañado por las estrellas y la luna.
Metí mi mano en el bolsillo del pantalón sacando una fotografía que estaba algo vieja, una sonrisa se había rebelado en mis labios.
Tenía en mis manos agarrado una foto que estaba algo vieja, había pasado un dedo el la fotografía, quería recordar los viejos tiempos con mis amigos Bianca y Hilbert que conocía desde la infancia.
—Que buenos tiempos eran esos. . .—puso en mi pecho la imagen, recordando de cuándo salí de aventura con un compañero pokémon que me lo entregó la Profesora Encina.
Una sonrisa tenía formada en sus labios, cada bello momentos que tenía por ahí deambulando en mi cabeza habían vuelto, unas risillas se me escapaban recordando momentos graciosos, suspire con algo melancólico para mirar otra vez la imagen.
—¿Bianca ahora trabaja con la Profesora Encina, y tu Hilbert? ¿Que has hecho? —le hable a la imagen donde un chico estaba posando, con una sonrisa en su rostro.
Hace mucho que cuando Hilbert había entrado a la Liga Pokémon, nunca más supe de él, había perdido el contacto con mi amigo, Bianca también perdió el contacto con el desde ese día.
Siempre lo llamo esperando una esperanza que me contesté y me hable animandamente como siempre, pero nada, siempre el buzón de voz y eso me sacaba de mis casillas.—Bianca y yo te extrañamos, todos los fines de semana nos vamos al Pueblo Arcilla, le preguntamos a tu madre si estás pero nunca estás —le seguía hablando a la imagen, mis ojos se fueron cristalizando intentando no llorar aún que me fue imposible.
Seguía haciéndome muchas preguntas esperando respuestas de alguien, nadie me iba responder ya que ahora estaba solo, ahora que quería un abrazó de alguien aunque estuviera sólo.
Estaba echó una bolita en el piso mientras lloraba, quería que todo fuera lo mismo que antes, quiero juntarme otra vez con mis amigos como hace tiempo pero siempre Bianca estaba ocupada y Hilbert estaba desaparecido. Unas cuantas lagrimas recorrían por mis mejillas que estaban algo rojas y calientes.
Estuve por unos minutos así hasta que mi videemisor comenzó a temblar, me seque las lágrimas de mis ojos, tome algo de aire, contesté sin saber quién era.
—Hola, soy Cheren ¿Necesitas al- —fui interrumpido por una voz masculina y otra femenina.
—¡Hey Cheren! ¿Todo bien? Vi que me has estado llamando y no te he contestado, lo siento mucho —habia dicho Hilbert con una sonrisa en su rostro.
—Hola Cheren, no pude evitar llamarte cuando Hilbert me había contestado la llamada me había emocionado y fue tipo "wuaah" —hablo Bianca mientras tenia su típico ánimo de siempre.
No pude evitar llorar, mi ojos otra vez se habían inundado de lagrimas que no podía contener mientras una sonrisita había parecido en mi rostro, estaba realmente felíz. Estábamos hablando después de dos años.
Realmente los necesitaba.
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Color Club: Slate; Pokémon.
RandomEl conjunto de vivencias colorean tu corazón hasta alcanzar una gama determinada, el cual, definirá todos tus pensamientos, sentimientos y preferencias. Para poder comprender el color, debemos entender de dónde proviene. ¿Qué es lo que reside en el...