– ¿no te cansas de mirar la lluvia? -escuchó a su madre entonar en un hilo de voz delicado.
le costó atender la interrogativa pues la feminidad de sus palabras se encubría dentro de las entrañas del sordo rumor de las gotas de agua y, llevado de la mano con el caso, se encontraba desatento de sus alrededores mientras intentaba detectar movimiento alguno en la esquina de la acera que observaba con esmero.
sintió el frío viento otoñal acariciar su cuerpo de manera grácil, haciéndose figurar la idea de que quizás era necesario cargar sobre su cuerpo una sudadera o, en su defecto, alguna sábana mientras realizaba en el marco de la ventana su espera, estando ansioso de encontrarse después de un duro fin de semana con los ojos oscuros del chico de cabellos bermejos.
estar expectante en su rincón se había convertido con el lento paso de las semanas en una actividad sospechosamente cotidiana, por lo que el hecho de que su madre apareciera repentinamente a sus espaldas para interrogar el por qué lo hacía le parecía algo habitual.
– Claro que no. -confesó.- ¿no te parece que se ve lindo?
la mujer negó con la cabeza, algo extrañada por la reacción de su hijo quien pretendía satisfacerla con su respuesta.
pero, claro, con "lindo" él no se refería por completo a la llovizna que dejaba detrás de sí un rítmico ruido adormecedor.
– no entiendo qué le ves de lindo a unas cuantas gotas de agua.
un suspiro fue arrebatado de sus labios al escuchar a la mujer comentar aquello, haciendo por consiguiente que la volteara a ver durante unos segundos, en los cuales parecía dudar antes de responder.
- a todo esto, la belleza es subjetiva, ¿no? -al verla asentir, se dio el gusto de proseguir.- mi definición de belleza pasa todos los días frente a casa, y tiene un nombre.
¿en serio? -se adelantó a preguntar, interesada en la historia que su hijo unigénito tenía planeado contar.
pero, cuando se encontraba a punto de introducir al rubio en su historia, se ve bruscamente interrumpido por sus mismos impulsos, los cuales le demandaban a no hacer mención alguna referente al chico.
giró su torso para quedar con el rostro nuevamente frente al cristal de la ventaba, observando
– sí. -murmuró para sí mismo, aún consciente de que su madre seguía detrás de él.
detrás de su corto comentario, el silencio azotó con brusquedad la extensa habitación.
– daría lo que fuera para poder hablarle.
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The guy who looks out a window on a rainy day. [YeoYan]
Fanficél era un chico tan simple, tanto así que sencillamente se conformaba con observar nostálgico el escenario que frente a sus ojos presenciaba los días en los que la lluvia caía sobre Seúl, degustándose de un amplio catálogo de sentimientos que el olo...