"Salidas/citas épicas"
Si no has leído la Primera Parte en la cuenta de KarenStarkStrange, detente aquí y pásate por su cuenta, lee la la primera parte, deja una linda estrellita y vuelve aquí a disfrutar de más Fargetta. Abrazos.
NUESTRAS CITAS ÉPICAS
Colaboración realizada por @gaby_fargetta y @KarenStarkStrange
AU Basado en Karmaland esperamos lo disfruten.PARTE 2
AU Basado en KarmalandPov. Vegetta
Nosotros nos llevábamos demasiado bien, tan bien que seguía sin salir de mi cabeza el hecho de que ambos lleváramos falditas. Además de lo gracioso que seguramente podríamos vernos, la sonrisa no salía de mi rostro el compartir éste momento con Fargan. Mi cena no sería algo poco, claro que no, lo mejor para mi chico. Tenía pensado preparar algo que hubiera preparado otras veces, no me la jugaría con algo nuevo porque no quiero cagarla. Pero obviamente, mi intención no sería como las otras veces; un plan de conquista. Estaba muy consciente de los sentimientos de Fargan hacia mí, y sé que él no me pondría presión, pero… aún así se siente tenso.
La cena no terminó como tenía pensado originalmente. La tormenta arruinó mi plan romántico de observar las estrellas en lo más alto de mi mansión como le decía Fargan a mi casa. Nuestra comida se quemó, aquello me frustró de gran manera, no podía darle a mi Fargan lo que se merecía ante mis ojos. Pero ahí estaba él mirándome con un sonrisa tan bella que me robaba el alma y sus ojos traviesos que lograron darme una razón para no molestarme por este momento y ver el lado bueno que su presencia me empujaba a ver.
Logré volver a tenerlo en mis brazos durante la tormenta. El sentimiento de protección que sentí abordar mi anatomía produjo que el momento se sintiera tan íntimo para mí; no fue un íntimo coital, pero fue un suceso que nunca habíamos compartido, es decir, nunca habíamos estado tan cerca el uno del otro. El calor de su cuerpo contra el mío provocó ese algo que deseo volver a sentir.Era curiosa la mirada de Fargan que tenía pegada a mi espalda. No sé qué le parecería tan interesante de ver en un hombre cocinando, pero a veces le miraba de reojo o simplemente lo miraba. Él sonreía, asentía, sus ojos brillaban o tenía esa sonrisa coqueta que andaba trayendo durante estos minutos. Yo rodaba los ojos o le devolvía la sonrisa. Mi cocina era algo estrecha, pero me encantaba pasar tiempo en ella; luego de unos momentos, me dí cuenta que el ambiente no estaba para nada incómodo a como hace algunos minutos, donde ambos parecíamos ajenos al otro, ahora, él me sonreía, y entonces sabía que la cita no estaba yendo del todo mal.
Luego de unos minutos, el horno estaba encendido y funcionando. Y ahora, lo que tocaba, esperar. Esperar hablando y compartiendo con Fargan. Él era muy despistado algunas veces, pero siempre tiene una facilidad para desenvolverse con cualquiera, sobretodo conmigo, esas risas que soltaba a veces y obligaban a mi vista a fijarse en él. Los coqueteos por parte de ambos no faltaron. Porque a pesar de sentir un calor en mis mejillas al corresponder, sabía que no era malo que sucediera, de vez en cuando, sentía que lo estaba incomodando, pero él se encargaba de negar tal acción, ya fuese esbozando una sonrisa y riendo. Si tuviera que resaltar otra cosa que me gusta de él… pues no terminaría nunca. Porque fuera por donde fuera que buscara, se me hacía tan difícil no prestarle atención por cualquier cosa que hiciera; parpadear, guiñar, mostrar sus dientes perlados, etc. —Oigo tu estómago gruñir, no mientas. —Le dije, apoyado en la encimera frente a él. Fargan volvió a negar, llevándome la contraria. Nuevamente volví a decirlo, pero su terquedad le impidió afirmarlo. Volvió a negar. Lo miré fijamente y él a mí, pero finalmente desvió la mirada soltando una carcajada, y yo sonreí sabiendo que se había dado por vencido a su mentira pequeña; sus adorable mejillas rojas produjeron alegría en mi rostro. —Tío. Sí. Tengo hambre solo que no quería arruinar tu momento de “cocinero sexy” — Asentí. — Yo también muero de hambre solo unos minutos más y está listo, probaras la mejor cena de la vida, chiqui, no por nada me llaman el mejor cocinero —Logre sacarle otra sonrisa. —Nadie te llama así, Vegetta. —Rió. —Claro que sí. —Objeté.
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¿¿...El Adiós...?? (Fargetta)
Aléatoire-adiós vegetta..- -adiós willy - Dijeron ambos chicos al abrazarse por la mudanza de willy y su novia a NY, Vegetta era el más Afectado.. Pero no se lo quería hacer notar, Guillermo ya se había acostumbrado durante mucho tiempo a la sonrisa de veg...