Un marzo para Marinette

31.- Caja de los prodigios

Miraculous, les aventures de Ladybug et Chat Noir y sus personajes son propiedad de Thomas Astruc y Zag Entertainment.

Palabras: 304.

31.- Caja de los prodigios

La sensación de tener entre sus manos la caja de los prodigios era extraña, sobre todo por que ahora le pertenecía. Marinette la sentía más pesada que antes, mucho más que cuando pertenecía a Wang Fu, incluso más que en el momento en el que tomó posesión de ella.

La caja había adoptado una forma diferente al cambiar de amo, así como sus colores que se habían mimetizado con los de Ladybug. No le parecía bonita, no del mismo modo en que se lo había parecido la del maestro Fu. La caja de los prodigios que le pertenecía a Ladybug era extraña, pero le parecía hermosa a su manera y, sobre todo, más mágica que antes.

—Wayzz —musitó depositando la caja en el suelo frente a ella—. ¿Siempre tendrá esta forma?

—La caja de los prodigios se adapta a su guardián. Tu caja representa a Ladybug.

—Pero yo soy Marinette, no Ladybug.

Sabía que era una afirmación un tanto estúpida puesto que en realidad era ambas.

—Entonces Marinette debería reclamar su caja —replicó Wayzz—, hacer que le pertenezca.

—¿Cómo se supone que tengo que hacerlo? El maestro Fu nunca me habló de nada de esto.

—Yo sólo soy un kwami, no tengo las respuestas que necesitas, Marinette. Pero sabes dónde puedes buscarlas.

—En el templo de los guardianes —contestó ella en un acto reflejo—. ¿Debería ir?

—Tendrías que hacerlo. Ellos pueden explicarte todo lo que tienes que saber sobre la caja y sobre lo que es ser guardiana.

Tikki los observaba desde la distancia, en aquellos días de adaptación no podía hacer más por su portadora, Wayzz podía aconsejarla mejor y ayudarla. Él había sido el kwami de un guardián, ella no. Hacerse a un lado le costaba, porque Tikki quería a Marinette y mantenerse al margen mientras sufría le dolía.

Fin

Notas de la autora:
¡Hola! Y con este drabble damos por finalizada la colección y el pequeño reto centrado en Marinette Dupain-Cheng. Gracias por haberme acompañado hasta aquí, espero que lo hayáis disfrutado.