capitulo 3

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11 años.

Ya ha pasado un tiempo desde el fallecimiento de mi padre, y, aun no lo entiendo ¿Por qué murió? El era un buen hombre, un buen padre ¿Qué tenía Dios en contra mío? ¿Qué hice mal?

Desde su muerte no me he podido asociar con nadie de mi nueva escuela, no hablo con nadie, solo voy a clases, y no hablo con nadie, tal vez a veces con mis profesores, pero solo les digo “Estoy bien”. El Director decidió llamar a mi madre, para saber que ocurría, porque la hija que era energética y muy sociable ya no lo es. Creo que no entienden que la muerte de mi padre me afecto mucho. Desde aquel día odio a los automóviles, odio subirme a ellos, siempre cuando debo ir a un lugar voy a pie, nunca en esa monstruosas maquinas. También se ha desaparecido mi apetito, ya no como nada, tal vez a veces, solo cuando mi madre me obliga. Antes siempre comía mucho, puedo decirles que hasta tenía sobrepeso. Pero ya no me apetece comer, solo dormir. 

Mis compañeros solo se disponen a molestarme, no sé cómo, pero supieron que ya no tengo padre, me han puesto diversos sobrenombres que me parten mi corazón. 

Desde ese día he podido ver al mundo con otros ojos. Creo que hasta podría decir que madure un poco, pero no lo suficiente. 

12 años

Cuando me miro al espejo, me doy asco; gorda, llena de estrías, mis piernas horribles, mi cara era como la de una persona muerta. Ya no soy la misma. Antes eso no me preocupaba ¿Pero porque ahora sí?. Un día no soporte ver esa imagen en el espejo y le di un golpe que lo partió en pedazos; de mi mano caían muchas gotas de sangre, pero me sentí aliviada, no sentí dolor alguno, solo observaba como caían esa sustancia roja de mi mano. Era un coloro hermoso, al sentirla salir de mi, sentía que todos los malos recuerdos salían de mi. Al verme en uno de los pedacitos que no se quebró, vi que algo me agarraba la mano que tenía herida, tenía la forma de una persona, pero no lo era, era humo, puro humo que tenía un par de ojos completamente rojos. Saque la vista del espejo y di vuelta mi cabeza para mirarlo de frente, el me miro al igual que yo. Después de unos segundos de que mantuviéramos las miradas unidas, miro mi mano, y apunto a la bañera, se acerco a mi oído y me dijo.

—Ve, hay una sorpresa para ti. — Era una de las voces más graves y más espantosa que haya oído en mis 12 años de vida. Se me pusieron los pelos de punta y la piel de gallina al escucharlo tan cerca de mí. Solo pude asentir con mi cabeza e ir a ver que había en dicho lugar. 

— ¡AAAAAAAAAHHHHHHH! —. Al abrir la cortina de baño estaba mi padre, tumbado en la bañera, completamente lleno de sangre, estaba completamente desnudo y con un gran agujero en donde debería estar su corazón. Sentí que algo me agarro de los hombros y se acerco a mi oído. 

—Tú, en poco tiempo, estarás igual que él, ¡JAJAJAJAJ! —. 

— ¡NOOOOOOOO! ¡PAPÁ! —. 

Desperté de un salto, llorando y toda sudada. Al ver que aún seguía en el baño, supuse que perdí la conciencia al perder mucha sangre. Vi que el baño estaba hecho un desastre; lleno de sangre, con vidrios rotos por doquier. Miré mi mano y tenía una gran herida, pero casi no me dolía. Todo había sido un sueño, o tal vez una alucinación, no lo sé, pero pareció muy real. 

13 años.

Desde ese día en el baño, no he parado de tener pesadillas. Lo raro es que en todas aparece esa cosa de humo con ojos rojos, ¿Qué es? Aún no he podido saber de dónde proviene o su nombre, pero sé que siempre sale en mis pesadillas. 

También recuerdo de lo bien que se sintió perder esa sangre, que los recuerdos se esfumaran por ese rato. Tal vez los recuerdos salían al abrir mi piel ¿Será eso verdad? No lo sé, pero decidí intentarlo de nuevo. Pero ¿Con que lo hago? 

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⏰ Última actualización: Nov 27, 2014 ⏰

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stronger forever (niall y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora