Sangre negra

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El gen salvaje:
Pandora

El gen salvaje:Pandora

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Sangre negra

Capítulo 1

Garbage.
A las afueras de la ciudad kigeni de Urbania, Verdonia.

Pandora.

—¡Ayuda! ¡Auxilio! ¡Ayúdenme! — gritaba un kigeni, corriendo entre las carpas piramidales tipo tepes en los que habitámos en el Garbage¡Ayuda! ¡Por favor! ¡Alguien...!

Tenía el torso descubierto y vestía un pantalón gris desgastado de las rodillas. Corría descalzo entre la muchedumbre. Las venas de su cuerpo estaban resaltadas y negras, y aunque su rostro me parecía conocido, no comprendía porque razón un kigeni venía a nosotros pidiendo auxilio.

¡Alguien que me ayude! Tengo frío... Mucho frío...

Todos los que habitábamos el basurero lo mirábamos desconcertados, se acercó a varios de nosotros y nos llamó por nuestros nombres, como si en verdad nos conociera.

Ese humano estaba loco, ninguno de nosotros podía ayudarlo, apenas sobrevivimos día a día con las sobras que ellos mismos arrojaban al Garbage, que no había forma que alguno de nosotros lo pudiéramos ayudar, y entonces dijo algo que nos dejó sorprendidos a todos.

—¿Por qué nadie me ayuda? ¡Soy yo! ¡Firulator! —exclamó antes de caer al suelo temblando quejándose de tener frío en pleno verano.

Firulator era un animorphe de aspecto canino que vivía cerca de nosotras en el Garbage. Pero hacía meses que nadie lo había visto, todos lo conocíamos porque solía ser muy agresivo, la última vez que se le vio por el basurero había agredido al hijo de un kigeni que no dudó en enviar a control de plagas por él, y desde que se lo llevaron nadie había vuelto a saber de él hasta entonces.

Mi hermana Galina y yo lo observábamos llenas de curiosidad. Éramos apenas unas crias. Ahora viéndolo bien, si se parecía a Firulator, solo era cuestión de imaginarlo con un poco de pelo café claro en algunas partes de su rostro y cuerpo.

Mi hermana menor no dejaba de preguntarme qué fue lo que le pasó, por qué se miraba así de demacrado, pero yo no sabía qué responder, el único que podía contestar esas preguntas era el mismo kigeni tirado en el suelo a unos cuantos pasos frente a nosotras

Uno de nuestros vecinos trajo una manta para cubrir con ella al kigeni.

—Gracias... Tengo frío... —seguía repitiendo mientras tiritava en el suelo.

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⏰ Última actualización: Oct 06, 2022 ⏰

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