Lonely

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Nada más que decir. MingHao no quiso ver a su padre en semanas. No había sido tan grave lo que había hecho, solo lo había gritado. ¿Verdad? De nuevo, se calló. ¿Qué sucedía cada vez que se callaba? ¿Por qué no volvía a hablar? Al parecer, el trauma de MingHao seguía ahí, intacto. Pero... ¿Cómo podrían curarlo?

Tres años después, un joven de quince años apareció en la vida de aquella bonita pareja. ¿Quién era ese adolescente? ¿Qué buscaba y por qué estaba ahí? Nadie lo conocía, solo él. Su acento chino, se remarcaba más de la cuenta, se notaba que siempre lo había hablado y recién estaba dejando de usar ese idioma. ¿Acaso serían conocidos?

"¡Ya basta!" Exclamó MingHao. "No, no sé quién es, no lo conozco. Déjenme". El joven comenzaba a sentir agobiado, abrumado. El profesor había presentado a su nuevo compañero de clase, Wen JunHui, pero al parecer, Hao no lo recordaba. El mayor de ambos se sentía triste, desolado, si había vuelto era solo por su amigo, por retomar el tiempo perdido, para abrazarlo y mimarlo como había hecho años atrás, pero él no lo recordaba... El joven caminó hasta la única mesa libre, al fondo de la clase, detrás de MingHao y SeungKwan, junto a MinGyu. Dejó su mochila a un lado y se tumbó en la mesa, mientras su ojos se aguaban. Quería llorar, pero no podía hacerlo nada más llegar, no podía llamar la atención de esa manera.

Cuando la primera clase del día terminó, MingHao se sentó sobre las piernas de MinGyu y lo abrazó. Una sensación de ira recorrió el cuerpo de Jun, ¿estaba celoso? ¿O tal vez molesto porque su amigo no lo recordara? Suspiró y trató de ignorarlo. "¿Por qué suspira?" Le murmuró MingHao a su novio, aún no hablaba con desconocidos. El mayor se encogió de hombros, el tampoco lo sabía, pero esperaba que no se sintiera solo. Por lo que decidió hablar con él. "¿De dónde dijiste que eras?" Preguntó curioso, tal vez así se sentiría más cómodo, al tener con quien hablar y contar algo sobre él. "Bueno... Vengo de Anshán, Haicheng", titubeó un poco nervioso. Hao abrió los ojos sorprendido, él también era de ahí. Dio algunos golpecitos a MinGyu y volvió a susurrarle algo. "Oh, cierto. HaoHao también vivía allí". Jun bajó la cabeza. ¿También le decía HaoHao? Eso siempre había sido algo suyo, algo íntimo, y MingHao permitió que también fuera de un tercero. "¿HaoHao?" El mayor asintió. Jun se levantó y se marchó sin decir nada. Todos estaban confundidos con aquel chico nuevo.

Al finalizar el día, su madre se presentó en la escuela, lista para recogerlo y llevarlo a casa de su antiguo amigo. Nada más subir al coche, su madre pudo notar la tristeza que su hijo emanaba. Algo había sucedido. Jun le contó que Hao no parecía recordarlo, tal vez se había olvidado de él por no haber estado o incluso podía estar molesto por haber dejado que se marchara. "¿Y si aquel abrazo le molestó? ¿Por eso no quiso hablar conmigo nunca más?" Su madre sentía su dolor, ella también había extrañado a su gran amiga, pero sabía que el pequeño MingHao lo había pasado muy mal y había necesitado muchos cuidados y paciencia para superar todo y ser quien era ahora, porque el MingHao de ocho años nunca volvió y nunca lo haría, todos lo sabían. "Iremos a su casa, no te preocupes". Jun quiso negar, sabía que no era lo correcto, pero su madre también tenía derecho a ver a su amiga. Así que, suspiró y dejó que todo lo que tuviera que suceder, ocurriera cuanto antes.

Una vez llegaron a aquella casa, ambos bajaron del coche, la adulta caminó más decidida hasta la puerta y sin pensarlo ni un segundo tocó el timbre. Su hijo la seguía desde atrás, temblando, asustado, ansioso por lo que pudiera llegar a suceder. La puerta se abrió despacio y una adulta, de la misma edad que su madre abrió la boca sorprendida. Esta negó varias veces, pensado que era una ilusión óptica, pero al ver que niñera así, ambas se fundieron en un cálido abrazo, uno de esos que tanto extrañaban. JunHui las miró desde más atrás mientras jugaba con sus manos. "Estás enorme" Exclamó aquella mujer y lo abrazó también. "Seguro que MingHao está feliz de volver a verte". El joven negó. "Ya me vio en la escuela, y simplemente dijo que no me conocía. Bueno, no lo dijo... Lo gritó y afirmó". La mujer trató de decirle que tal vez, se equivocó y solo fue un malentendido, pero Hao no estaba allí para confirmarlo. "Cuándo vuelva de música, lo hablaremos. ¿Te parece?" Jun asintió algo decaído.

Cuando MingHao regresó a casa algunas horas después, Jun lo esperaba sentado en el sofá, con las piernas cruzadas y jugando con los botones de su uniforme.  Al entrar en la casa y ver al chico ahí, se sorprendió. Frenó y se alejó algunos pasos, asustado. Recordando aquel abrazo sin permiso, aquella primera sensación de agobio y ansiedad. Su madre se acercó a él, y trató de calmarlo. "Es JunHui, no te hará daño". Hao no parecía muy convencido y trató de huir, su madre lo detuvo. Comenzó a llorar. "Tranquilo, MingHao. Respira hondo, no sucederá nada. Es tu amigo, Junnie". Cerró los ojos. Recordaba los lindos momentos que habían pasado, pero también recordaba todo lo malo que había sucedido después de aquel abrazo. Estaba asustado.

—M-miedo... —Murmuró para su madre.

C/S : Why So Lonely — Wonder Girls

REAL | JUNHAODonde viven las historias. Descúbrelo ahora