1. El comienzo de un secreto

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"CHARLOTTE"

La vida de una dama aristócrata no es del todo emocionante , según mi punto de vista . Los hermosos pero incómodos vestidos , las largas juntas sociales , las fiestas , todo esto es abrumador .

Hay veces en las que quiero escapar de todo esto . Ser libre , ser yo misma no una mas de la sociedad , no una sumisa , no una chica perfecta pero no lo hago por miedo .

Todas las chicas del pueblo están casadas , tienen buenos hombres como maridos , pero esta no es la vida que yo quiero para mi , yo quiero ser mucho más de eso.

Ahora me encontraba sentada mientras que Rebeca , la mucama me peinaba . Odiaba peinarme , yo soy mas de usar cabello suelto .

—Mi niña , que hermosa se ve . —Dijo dando los últimos toques . Sonreí apenada .

—Gracias Rebeca .

—¿Y cuales son sus planes para hoy?

A Rebeca la conozco de toda mi vida , ella fue quien me crió , debido a que mi padre viajaba constantemente por su trabajo . Ella es como mi segunda madre .

—Hoy tengo clases de piano y mas tarde iré a la pequeña fiesta de té de Elizabeth .

—Me alegra que se distraiga , iré a preparar el desayuno . Su padre la espera en su despacho . —La mujer se despidió y se marcho .

Me dirige al despacho de mi padre .

—Buenos días cariño .

—Buenos días padre .

—Me alegro que este aquí tengo buenas noticias . Recuerdas a mi viejo amigo de Oxford .

—Claro que lo recuerdo .

-Esta enfermo y debemos de terminar unos negocios . Por eso el enviara a su hijo Thomas , el es un joven muy apuesto y bastante bien posicionado en la sociedad.

—Padre ...

—Charlotte todas tus amigas ya están casadas y tienen hijos .

—Lose , lose pero es que ...

—Esperas al indicado . Sera mejor que me vaya , hay mucho trabajo —El hombre se levanto de la mesa beso mi frente y se marcho .

Y allí estaba sola , nuevamente . Mi estómago rugía ferozmente . Tenia hambre . Fui a la cocina y me senté en la mesa .

El desayuno estaba listo y comencé a comer , sola en la gran mesa . Casi nunca comía con mi padre, la razón su trabajo .

Las horas pasaban lentamente hacia mi lección de piano , la señora Adams . Una mujer bastante furiosa a decir verdad. Era viuda y tenia ocho hijos pequeños que alimentar , sentí pena pero eso no justifica su manera de tratar a las personas .

—Un dos y tres . —Comencé a tocar , mis dedos se deslizaban suavemente entre las teclas . ( multimedia)

La música era una increíble manera de expresarse , en las reuniones que solemos hacer en casa , papá siempre le gusta que toque el piano

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La música era una increíble manera de expresarse , en las reuniones que solemos hacer en casa , papá siempre le gusta que toque el piano .

Debo de tocar perfectamente , sin ningún error , si me equivocaba sufriría las consecuencias , la humillación y la vergüenza .

Pero después de todo era una humana , una imperfecta humana .

—¡Que fue eso Charlotte!

—Lo siento señorita , no volverá a pasar .

—Eso espero . De nuevo.

Después de tocar numerosas veces la misma pieza , mis manos me dolían . Me detuve de pronto, las manos me dolían demasiado y mi espalda me estaba matando. 

Al detenerme la mujer me miro furiosamente .

—Charlotte eso fue ...

—Increíble— Dijo mi padre desde la puerta .

—Señor Baker— La mujer cambio su expresión.

—Creo que mi hija debe de descansar esas maravillosas manos que tiene — Se acerco y beso mis manos .

—Gracias .

—Bueno yo ya me iba , buenas noches - La mujer se marchó.

—Dios te dio un don , un increíble don que debe de ser compartido mas seguido.

—Tu sabes que me pongo muy nerviosa tocar frente a muchas personas.

—Claro que lo se , soy tu padre . Poco a poco aprenderás a controlar ese miedo.

Puedo tocar frente a conocidos , pero cuando son personas que no conozco entro en pánico absoluto . Mis manos sudan demasiado y ademas tiemblan. Pero creo que con el tiempo pueda lograr controlar ese miedo . 

Me levante del gran piano de cola , y lo mire fríamente.

—Sera mejor que vaya a dormir , estoy algo cansada .

—Lo entiendo .

No quería ser dura con él , pero lo era así era yo . Se que la perdida de mamá fue muy duro para él pero para mi fue horrible. Cuantas noches no llore pensando en ella , cuantas noches me culpe por algo que no hice . No fue mi intención , yo nunca quise ... Con tan solo recordarlo mi corazón se detiene y me entran unas ganas inmensas de llorar. Trato de sacarme ese pensamiento de mi cabeza pero es inutil.

Me dirigo a mi baño, lavo mi cara y la seco con cuidado.
Abro la ventana y me detengo a observar la vista detalladamente. Un cielo estrellado estaba a mis pies , tome un poco de aire .
Una estrella fugaz paso , cerre los ojos y pedi un deseo.

Espero que ahora solo me pasen cosas buenas .

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El oscuro año de 1878 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora