Eres Mi Nota Favorita || Suga [T.S]

《Capítulo 2》

—¿Seguro que estás bien?

—Sí. ¡Ya deja de preguntarlo! Estás arruinando nuestra cita.

—Pero... no es normal que te desmayes de la nada.

—Estaba cansada, ya no le des más vueltas. Ahora, miremos la luna.

Me rendí y contemplé lo antes mencionado. Estábamos en el lugar de siempre, ambos sentado bajo el cerezo en el cual habíamos grabado, tiempo atrás, nuestro amor.

A pesar de que le dieron de alta del hospital, aún sigo preocupado. Tengo miedo de perderla, de no verla más. Ese se podría decir que es mi mayor pesadilla y lo comprobé cuando la vi con un suero. Era verdad lo que decían, el amor nos hace más fuerte y, al mismo tiempo, más débiles.

—Estoy bien...

~*~

—Suga, no podré estar en tu presentación.

—¿Por qué?

—Mi familia me pidió ir con ellos de viaje y no me puedo negar.

—Está bien.

No podía enfadarme, sabía como eran los padres de ella, pero eso no restaba que me sentía triste y decepcionado.

—Hagamos un pacto.

—¿Cuál sería?

—Si ganas, puedes pedir un deseo.

—¿Y si pierdo?

—Me comprarás chocolates.

—Acepto.

~*~

Una hora para que comience el concurso. Estoy muy nervioso, pero lo disimulo con un rostro enfadado, como se me ha hecho costumbre.

Si estuviera aquí ella, seguramente me diría.

—No pongas esa cara de bravucón.

—Todo irá bien, no te avergüences. Recuerda que estoy aquí.

—Ni se te ocurra perder, sino tendrás que comprarme comida.

Y cosas por el estilo. Esos pensamientos siempre me sacan una sonrisa, me hacen sentir seguro, aún cuando no esté conmigo.

Así los minutos pasaron, hasta que me llamaron.

—Concursante Min YoonGi, se le solicita en el escenario.

Cuando iba hacia allí, una mujer me detuvo.

—¿Qué sucede?

~*~

Las teclas ya no son cálidas, sino frías y oscuras. Ya no me relaja tocar el piano, me trae tristeza y rencor.

La melodía de mi canción favorita ya no la oigo, se me vuelve eco entre los murmullos del jurado. Me duele producir el ruido tan amable de un instrumento en pena tras perder su propia música.

—Ella te dejó esta carta.

El sudor se encarna en mi piel y presiono las teclas con tanta fuerza que parece que se romperán en mil pedazos. Tanto es mi recor hacia mi mismo que mis dedos comienzan a tener pequeñas cortadas de color rojo.

《Amado Suga:

Si estás leyendo esta carta, debe ser que no te veré más. No tengo mucho que decirte, salvo un "lo siento" y "gracias".

Perdón por engañarte y ocultarte algo tan importante. No quería que sufrieras por mí, aunque, ahora, debes de sentirte decepcionado y triste, por ello, lo siento.

Te agradezco por hacerme muy feliz todo este tiempo. Cuando me preguntaste si quería ser tu novia, pensé en decir que no, ya que estaba enferma, pero ahora estoy alegre de haber aceptado. Simplemente, gracias.

Gracias por aceptarme en tu vida y lo siento por ser egoísta.

Te amo.》

Gané el concurso, así que, vuelve. Ese es mi deseo.

Había perdido a mi nota favorita, para siempre...