La mentira mata pero ¿A quién? Al que miente. Sé podría creer que es al otro pero el que de verdad muere es el que miente porque se miente a si mismo. Se apuñala el mismo. Ahora lo sé pero ya es muy tarde, el cuchillo ya lo tengo clavado en el corazón, no creo poderlo sacar. Creí que al decirte lo mucho que no te quería a mi lado, te irías y no volverías pero al decirte esa mentira me di cuenta de lo mucho que me herí. Y cuando volviste me di cuenta de que no tenía más espacio para un segundo cuchillo por eso me lo clave en la mente. Me dije a mi misma que te olvidaría, de que tú harías lo mismo y de que hiciste lo mismo pero ¡¿A quién le estoy mintiendo?!