Especial: La Leyenda de las Sirvientas

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El Jardín Seguía igual de hermoso, aunque habían cambiado de jardinero muchas veces, Una de ellas termino de limpiar las ventanas para estirarse.

La otra termino de regar las flores, antes de tomar un trapeador y comenzar a limpiar el suelo entre las dos siendo que su hermana también tomo uno.

Luego de largos minutos limpiando, terminaron llevando su mirada al muelle, el cual, aunque estaba repleto de barcos mercantes para ellas estaba vació.

Simplemente suspiraron y siguieron con sus labores, mientras caminaban las sirvientas menores se inclinaban elegantemente ante ellas.

Sin embargo, ellas realmente no las veían a ellas simplemente veían los cuadros y las fotografías que estaban en la pared.

Donde veían, imágenes que revivían sus recuerdos.

Una de ellas se detuvo y acerco su mano a uno de los cuadros sin embargo la otra suspiro dando un suave golpe a la mano de la otra, de esa forma ambas siguieron su camino.

/...Hoy es ese día.../

/...Si..Hoy es ese día/

/...Presentaremos nuestros agradecimientos? /

La otra asintió.

/...Prepararemos El plato favorito del Dueño/

Ambas asintieron tomándose de la mano caminando a la cocina.

Al llegar a aquel lugar, el encargado de la cocina y el resto de cocineros simplemente se inclinaron arrodillándose antes de salir de la cocina dejando el gran "castillo".

Ambas suspiraron y comenzaron a preparar aquel plato desde cero, lo más lento y cuidadosamente posible.

Nadie se acercó a la cocina, aunque desde fuera se podía escuchar el llanto y el sollozo de ambas.

Aun así, Nadie se acercó.

Usando las mejores carnes y el mejor de los panes (preparado por ellas a mano) y las papas de mejor calidad.

Apenas la noche cayo, las personas entraron a el comedor.

Sin embargo, aunque la cabeza de la familia solía ser un poco arrogante y solía pedir que todo estuviera apenas él se sienta.

El no grito, el no alzo la voz, nadie lo hizo, simplemente juntaron sus manos y comenzaron a rezar.

Mientras entraban, las hermanas a el comedor.

Ellas vieron la gran cantidad de asientos vacíos, incluyendo sus asientos. Los cuales decían "Ari" y "Aru", aun así, llevaban mucho sin sentarse en ellos.

Ellas colocaron suavemente los platos frente a la familia y el hombre simplemente sonrió alegre, mejor dicho, no solo él sonrió de esa forma. Toda la familia lo hizo.

/...Espero lo disfrute.../

Dijo Aru tranquilamente mientras Ari llevaba el carrito con el que trajeron los platos a la cocina, Aru simplemente camino a la pared quedándose de pie.

/...Ya paso el tiempo de su castigo auto impuesto...deberían sentarse y comer con nosotros/

Los niños también comenzaron a pedirles que se sentaran, sin embargo, las dos bajaron el rostro negando.

Las dos simplemente permanecieron de pie durante toda la comida, aunque la familia intento comer lo más lento posible intentando forzarlas a sentarse y comer con ellos.

Ellas no se movieron.

Al final, ellas no se sentaron, no hablaron y no se movieron.

Parecían estatuas, si no fuera porque una de ellas lloraba.

A New World With a BattleshipDonde viven las historias. Descúbrelo ahora